Hace unos días un gran amigo, quien también es amigo de nuestro país y tiene años visitándolo y haciendo negocios aquí, me envió copia de un artículo periodístico, donde se presentaban las quejas sobre la prostitución en Sosúa.En 1938, el dictador Rafael Leónidas Trujillo en la Conferencia de Evian, ofreció a los judíos, que en esos momentos sufrían la despiadada persecución de los nazi, recibirlos en Sosúa, donde se les dio facilidades para instalarse y establecer negocios que les permitieran subsistir. Cerca de 800 judíos recibieron visas y se quedaron en el país donde formaron sus familias e hicieron de Sosúa, provincia Puerto Plata, su hogar definitivo.
Sosúa atrae mucho turismo europeo y canadiense mayormente, por la belleza de sus playas y por sus características que la hacen ideal para los deportes acuáticos como el buceo, el surfing, el velerismo, entre otros.
Sin embargo, si no ponemos atención a los problemas tal y como reseñaba la periodista Yamira Taveras del periódico HOY, esta situación puede variar. De momento, el auge de la prostitución ha alejado al turismo familiar. Estoy convencido de que nuestras autoridades no desean que a la República Dominicana se la identifique como destino de turismo sexual, ya que esto solo conseguiría empañar la imagen de esta zona y en definitiva de todo nuestro país. Por demás, se darían motivos a los países del Caribe que compiten con nosotros, para detractarnos.
Este gobierno tiene como una de sus metas duplicar la cantidad de visitantes que recibimos cada año. Afortunadamente, a pesar de la crisis mundial, el número de visitantes ha ido en aumento.
Pero esto no constituye una razón para dormirnos en nuestros laureles, todo lo contrario. Además de la prostitución, se debe poner atención a otros temas: el narcotráfico, la seguridad, el saneamiento y la higiene de los sitios públicos, la organización del tránsito y seguridad vial, los costos excesivos, entre otros. En la medida en que se mejoren estos asuntos, más nos acercaremos a la meta propuesta.
El aumento del turismo proporcionará un gran empuje a la economía en general por un efecto multiplicador. No solo se benefician los dueños de hoteles y sus empleados, sino también los productores agrícolas e industriales, los transportistas, los vendedores de artesanía, los guías y una larga lista más. Por supuesto, se crearán una cantidad de empleos y así se daría oportunidad de trabajo digno a muchas de las mujeres que hoy buscan en las calles el sustento de sus familias.
La mayor parte del trabajo por realizar está en las manos del Ministerio de Turismo, de las diferentes alcaldías y de la Policía Nacional, pero lo es también de cada ciudadano en la medida en que demostremos nuestro civismo y nuestro orgullo por el país.
Somos una nación que logra lo que se propone, así que manos a la obra, mejoremos los servicios turísticos en Sosúa y en todo el país. Hagamos que cada visitante extranjero salga complacido y sea portavoz de la sonrisa, de la amabilidad y el calor que solo los dominicanos podemos ofrecer.
Este gobierno tiene como una de sus metas el duplicar la cantidad de visitantes que recibimos cada año. Afortunadamente, a pesar de la crisis mundial, el número de visitantes ha ido en aumento.