El presidente Danilo Medina recibió ayer los saludos con motivo del año nuevo, en un acto solemne, celebrado en el Palacio Nacional.La ceremonia sólo duró veinte minutos, en contraste con las efectuadas en administraciones anteriores con horas de duración. El jefe de Estado recibió las felicitaciones de miembros del cuerpo diplomático, organismos internacionales y representantes de la Iglesia católica. El primero en saludar, atendiendo al protocolo de rigor, fue el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, al cual siguieron Agripino Núñez Collado y el nuncio apostólico de su Santidad Benedicto XVI, Josef Wesolowski. Medina estuvo acompañado por la vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño de Fernández; por su esposa, Cándida Montilla, y el vicecanciller José Manuel Trullols, en representación del canciller Carlos Morales Troncoso, quien no pudo asistir al acto por motivos de salud. En el acto fue notoria la ausencia de dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y de funcionarios de la actual gestión, a excepción de los ministros de la Presidencia, José Ramón Peralta, Temístocles Montás y el consultor jurídico del Poder Ejecutivo, César Pina Toribio, quienes estuvieron en el acto, pero no para presentar saludos al mandatario, con el cual despachar asuntos es algo habitual.
Aunque el acto estaba pautado para las 5:00 de la tarde, la prensa fue convocada para las 4:30, con el fin de que nada interrumpiera el evento y en atención a la puntualidad que caracteriza al presidente Medina. Al evento fueron invitadas 60 personas de las cuales 36 eran miembros del cuerpo diplomático, 10 cónsules, nueve de organismos internacionales y el resto miembros del clero.
Entre quienes saludaron al mandatario estuvieron el embajador de Estados Unidos, Raúl Yzaguirre; el representante en el país de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, Gero Vaagt; del Fondo Monetario Internacional, Mario Dávila, y del Banco Interamericano de Desarrollo, Manuel Labrado. Asimismo, la representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Valerie Julliand; Irene Horejs, de la Unión Europea, así como representantes de Haití, Japón, México, Belice, Taiwán, Cuba, Marruecos, Suiza y Costa Rica, entre otros.