«Maremoto» del 1998, el Fake New que puso en alerta a Santo Domingo

Siempre han existido las noticias engañosas, pero a partir de la emergencia de Internet y de nuevas tecnologías de comunicación e información, las Fake News han proliferado a lo largo y ancho del planeta.  Este término es utilizado para conceptualizar la divulgación de noticias falsas que provocan un peligroso círculo de desinformación. Este término se […]

Siempre han existido las noticias engañosas, pero a partir de la emergencia de Internet y de nuevas tecnologías de comunicación e información, las Fake News han proliferado a lo largo y ancho del planeta.

 Este término es utilizado para conceptualizar la divulgación de noticias falsas que provocan un peligroso círculo de desinformación.

Este término se hizo popular, en 2016, cuando Donald Trump, Presidente de EE.UU., consideraba que las noticias que emitían los medios de comunicación como el New York Times y el Washington Post eran fake news.

A partir de ahí, el concepto se popularizó y hoy en día se refiere a todo lo que tiene que ver con una noticia no contrastada, no verificada y con informaciones en forma de bulos que, además, se expanden y se viralizan a través de las redes sociales.

Hoy en día, las redes sociales permiten que los usuarios sean productores y consumidores de contenido engañoso, falso o fabricado. Así se genera un circuito vicioso, y una noticia falsa se replica miles de veces en cuestión de segundos.

Si nos centramos en su impacto en la política, las noticias falsas suponen una amenaza para las democracias de países occidentales y para la convivencia entre los ciudadanos al atentar contra los valores democráticos.

Pero, antes de las redes sociales, ¿cómo se reproducían las noticias falsas?

Es válido mencionar un ejemplo que muchos recordamos. El famoso falso maremoto del a’Oo 1998.

Era septiembre de ese año y alguien corrió el rumor de que  el mar había entrado por San Pedro de Macorís y en poco tiempo llegaría hasta Santo Domingo.

Es importante destacar que una semana antes el Huracán Georges categoría 4 habia pasado por el país dejando devastación y muerte de más de 600 personas, por lo que crear el pánico en la población no era cosa difícil.

Alguien recibió una llamada de una persona  de la provincia de San Pedro, esa persona llamó un vecino, ese a otro vecino y en pocos minutos los ciudadanos empezaron a salir de sus casas con ajuares en mano, cargando niños, en pijama, descalzos… otros tantos prefirieron quedarse en casa, hasta que rato después las autoridades salieron a las calles a desmentir la información.

Digamos entonces que, “el boca en boca”, es una forma efectiva de reproducir fake news.

Las falsas noticias son un fenómeno que ha existido por años, pero actualmente han tomado  más fuerza con la era digital ya que el acceso a la información es más sencillo, llamativo y superficial, lo que influye en la opinión pública, afectando algunos aspectos sociales, pues al final estas terminan dependiendo de intereses o ideologías.

¿Acciones para contrarestar las Fake News?

Las principales plataformas de redes sociales han diseñado estrategias para mitigar la propagación de falsas informaciones, por ejemplo Facebook, a raíz de la emergencia sanitaria de covid-19, dio a conocer un informe donde asegura que 2.000 personas fueron guiadas con información verídica para evitar desinformaciones.

Sin embargo, tras los esfuerzos encaminados a moderar la difusión de noticias falsas en redes sociales, los usuarios siguen siendo víctimas de las fake news.

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