No es necesario seguir con el financiamiento público a los partidos políticos para que unos tipos reciban 7 millones de pesos al año y con eso vivan sin trabajar. Ahora tenemos 34 partidos, 30 de ellos son “pymes electorales” que no aportan nada o búsqueme un pronunciamiento sobre las reformas propuestas por el Gobierno, lo único que hacen es hacer bulto un año antes de las elecciones para lograr pactos con los partidos mayoritarios. Pero el gran problema que demuestra que no es necesaria la financiación pública es que hay cinco “pejes gordos” que fueron excluidos de procesos judiciales porque fueron los grandes donantes de los partidos políticos.