El escenario electoral del 2024 no se puede proyectar solo en la relación ganar el poder o perderlo, pues la distribución del escenario electoral en tres fuerzas políticas, da para analizar más que eso. Para el PLD es una elección casi de vida o muerte no ganar, sino retener el segundo lugar como fuerza electoral, eso ya sería ganar aunque no alcance el poder.
Pero objetivamente, esa posibilidad luce cada vez más lejos para ese partido, pues al día de hoy todo apunta quedará en la tercera posición, pues las encuestas que se hacen colocan a Leonel Fernández en sólido segundo lugar. Aunque la FP como partido aparece en tercero, la historia dice que los candidatos arrastran los partidos, no al revés.
La mayor derrota del PLD no sería solo quedar en tercer lugar, sino en un lejano tercer lugar, un escenario que no se puede descartar ante el poco avance de sus figuras presidenciales y la tendencia de polarización del electorado entre los favoritos de la contienda.
El caso de la Fuerza del Pueblo (FP) es distinto, ese partido en todos los escenarios planteados del 2024 gana. El objetivo de toda organización es alcanzar el poder, y si el partido de Fernández lo logra en su segunda participación, será una victoria contundente. Sin embargo, si esa organización no logra conquistar la Presidencia, todo apunta a quedará en segundo lugar, y para un partido surgido en 2019 frente a todas las adversidades, es una victoria electoral.
En caso que la organización no logre el segundo lugar, pero avanza sin quedar en un lejano tercer lugar como ocurrió en el 2020, también gana, pues no tendrá retroceso en su avance electoral.
Para el PRM, por ser el partido en el poder, no hay espacio a interpretaciones, si pierde la Presidencia, perdió. Si gana en los niveles congresuales y municipales, hay espacio a interpretaciones, dependiendo si aumenta o reduce su matrícula en esos niveles.