En algunas oportunidades en las que he tenido intercambios y discusiones sobre gramática, a modo de aprender y edificar, he dicho que en este universo de las letras y las normas que las rigen, predomina mucho el sentido de la lógica al enunciar cualquier frase.
Inicio así esta entrega de Periodismo y Gramática, porque el otro día escuché a alguien que, mientras compartía una anécdota, pronunció la siguiente frase: “…porque cuando yo volví en sí”. Esta es una construcción gramatical en la que, sin dudas, hay un fallo que violenta hasta la lógica.
Te invito a que la leas en voz alta el enunciado anterior y te respondas si cuando despiertas de un estado inconsciente vuelves en ti o en otra persona, porque lo correcto, en el caso del ejemplo que he compartido para edificar en este caso, es “…porque cuando yo volví en mí”.
Cuando una tercera persona despierta de un estado que la mantuva ajena a la realidad presente, suele escucharse la expresión siguiente: “Cuando él volvió en sí, se dio cuenta que le habían robado todo”. Sé que ahora, con este ejemplo, quedas edificado en cuanto al empleo correcto de este enunciado que a muchos confunde.
Tal como lo explican las fuentes oficiales, “volver en sí” significa “recobrar el conocimiento”. Se trata de una construcción reflexiva, por lo que debe existir concordancia entre el pronombre tónico y el sujeto de volver (volví en mí, volviste en ti, volvió en sí, etc.).
Reiteran las fuentes, para que no haya confusión, que es incorrecto decir, y perdonen lo reiterativo, “volví en sí” o “volviste en sí”, y lo mismo aplica para dos o varias personas pluralizando el verbo.
Y a propósito de lo anterior, los expertos en el tema señalan que “la forma del pronombre reflexivo correspondiente a la tercera persona del plural es “sí”, la misma que la del singular: “Dos se desmayaron al ver el accidente, pero volvieron en sí al oler un frasco de alcohol”.
Hablar y escribir bien no es difícil ni complicado, solo hay que crear una disciplina de leer, subrayar lo que no entendamos y validarlo con las fuentes confiables.
Por eso, a propósito de esta entrega, vuelvo y te repito que nunca olvides que lo correcto es: “Tú volviste en ti”, “él volvió en sí”, “yo volví en mí”, etcétera, pero nunca podrías volver en sí, a menos que ocupes el cuerpo de otra persona… y eso, mi querido lector, es imposible.
¡Gracias por leerme! l