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Agencia.- El insólito incidente que tuvo lugar en una sucursal bancaria de Río de Janeiro, Brasil, ha captado la atención internacional.
Una mujer, Érika de Souza Vieira Nunes, acudió al banco con su tío, quien yacía sin vida en una silla de ruedas, para solicitar un retiro de 17.000 reales. La presencia del cadáver durante la transacción dejó perplejos a los empleados del banco, quienes decidieron documentar la situación y alertar a las autoridades.
Los trabajadores, desconcertados por la escena, intentaron lidiar con la situación de la mejor manera posible. Mientras la mujer intentaba realizar la transacción, sostenía la cabeza inerte de su tío y le instaba a firmar los documentos necesarios. Ante la evidente incapacidad del fallecido para cumplir con el trámite, los empleados se mostraron cautelosos y solicitaron la firma de Érika.
La llegada de la policía y los servicios de emergencia marcó el desenlace de este extraño episodio. Tras determinar que el cuerpo llevaba varias horas sin vida, el cadáver fue trasladado al Instituto Médico Legal para su investigación. Mientras tanto, las autoridades continúan indagando sobre la relación entre Érika y su tío, así como las posibles acusaciones de malversación de fondos y profanación de cadáver que podrían enfrentar.
