1. En una ocasión leí que el agua con vinagre ayuda a preservar mejor los colores de un traje de baño nuevo. Lo intenté con mi más reciente traje de baño y la verdad es que funcionó. Lo dejé por unos 20 minutos en agua con varios chorritos de vinagre blanco.
2. Tengan cuidado con piscinas o rocas de superficies muy ásperas, destruirán el bañador de más alta calidad.
3. Ojo con el bronceador, sobre todo a aquellas que hacen sus preparados naturales. Al igual que los tintes semi-permanentes, éstos pueden dañar tu traje baño favorito.
4. Cuando salgas de la piscina o la playa enjuágalo con agua limpia y tiéndolo, preferiblemente no directamente al sol. Si lo llevarás puesto todo el día, hazlo tras cada chapuzón.
5. No lo dejes en tu bolso de playa. Aparte del olor a humedad que tomará, los colores pueden desteñirse con mayor facilidad y teñir otras áreas de la pieza.
6. Las primeras lavadas hazlas a mano, con un detergente líquido suave o uno diseñado para lavar la ropa de bebé. La lavadora puede deteriorar la lycra.
7. Si decides lavarlo en la máquina, entonces lo recomendable es que no lo pongas sin protección ni que le eches el detergente directo. Protegerlo significa colocarlo en una funda de almohada o una funda de las que vienen con los zapatos que minimiza el riesgo de que los tejidos se deterioren.
8. Por favor, cero cloro. Si necesitas ayuda para quitar una mancha, recurre siempre a ayuda profesional.
9. Ahora se está usando mucho que hacemos mix & match con nuestros biquinis. Recuerda que si lavas mucho una pieza y la otra no, al final una tendrá un color más desgatado que la otra.
10. Por último, lo ideal es que para tus fines de semana te lleves al menos dos trajes de baño. Esto reduce el riesgo de dañar uno más rápido por la excesiva exposición a agentes agravantes, como sol, cloro, sal, bloqueadores o bronceadores, por sólo mencionar algunos.