Dicen que en el mar la vida es más sabrosa y en el mar, todo es felicidad, ¿el autor habrá experimentado alguna vez lo que es ser consentido con un masaje en el hogar de Neptuno? Si no lo hizo, entonces no tiene ni remota idea de lo que hablaba, porque esta frase sólo puede salir de alguien que haya vivido la experiencia de Ocean Spa Doctor Fish.
Como su nombre lo dice, se trata de un spa, pero no vayas a pensar que lo de océano viene porque vas a un lugar situado en la playa, te quedarías corto, porque esto es mil veces mejor. Todo comienza en la playa de Los Corales en Bávaro, Punta Cana, desde que llegas su personal te atiende como si fueras de la realeza.
Primero te dan un brevísimo instructivo, porque tampoco es para examen, donde te ilustran sobre lo que verás y vivirás a bordo. Luego abordas un catamarán de dos niveles convertido en todo un spa, donde te entregan tu toalla y guardas tus pertenencias en un armario para que nada se interponga entre tú y la relajación. Que no te detenga el hecho de que los botes te marean, por alguna extraña razón no sientes absolutamente nada bailoteando en tu cabeza, al contrario, si entras con migraña saldrás sin ella.
La excursión dura aproximadamente tres horas y su objetivo es proporcionar una relajación extrema, por eso la aventura de embarcarse. El comienzo de la experiencia dependerá mucho de los grupos que vayan a bordo, puesto que mientras uno comenzará con una actividad, mientras el segundo desarrolla otra, aunque al final todos se relajarán. Pero que no se te ocurra pensar que estarás en una embarcación repleta de gente cual si fuera el Titanic, jamás, la capacidad es limitada para garantizar el servicio personalizado.
Arriba la tripulación está muy bien preparada, y si corren con la suerte de que les toque Pedro ya tienen un bono extra, porque este cubano se esfuerza al máximo para que todos disfruten. ¿Piensas que no hay nada como un masaje? Pues sí lo hay, un masaje mientras respiras aire fresco, sientes la suave brisa y te limitas a escuchar el sonido del agua mientras las olas golpean el barco. Las expertas comienzan por tu cabeza, continúan con tu espalda, brazos y concluyen con tus pies. La sensación se torna a veces indescriptible, por momentos crees perderte y viajar a una realidad paralela, la mezcla es mágica.
Unos minutos en las camas de masaje y el trabajo humano inicial estará completo. Su segundo piso está preparado para que disfrutes al máximo de una corta sesión de bio-pilates, mientras tu vista se pierde entre el hermoso azul de las aguas de Punta Cana y la verde vegetación que se encuentra en la orilla.
El bono especial de masajes no está arriba, tienes que mojarte para sentirlo. Esta gente ha pensado en todo, y por eso disponen de unos colchones flotantes que colocan en una piscina natural, para que te recuestes en ellos y dejes que las olas hagan su trabajo con tu espalda. No tengas miedo pensando que llegarás al Canal de la Mona si te duermes, como diría el Chavo, “todo está fríamente calculado” y ellos nunca te abandonan, además de que las colchonetas están atadas. Aquí puedes aprovechar y darte un chapuzón, pero antes infórmalo al personal que te asiste.
Desintoxicación interna
¿Qué tantas toxinas crees que puede tener tu cuerpo? ¿Te gustaría además de relajarte dejarlas botadas en este viaje y todo por un mismo precio? Estás en el spa indicado. Durante el viaje también tendrás la oportunidad de ionizarte, suena raro pero es sencillo e indoloro.
Se trata de una terapia destinada, entre otras cosas, a mejorar el hígado y la función renal, mediante un proceso de desintoxicación electromagnética que se lleva a cabo a través de los pies. No tuerzas la boca, que nadie habla de cirugía, inyecciones ni choques eléctricos. Simplemente te sentarás, entrarás los pies en el mismo envase que te hacen el pedicure y un arreo que se coloca en el agua logrará que de tu cuerpo salgan las toxinas y se depositen en el agua, no vayas a asustarte si ves que pasa de amarillo claro a naranja, de ahí a marrón o incluso al negro o verde, eso significa que te irás como nuevo. Sólo un consejo, si vas en pareja que no se les ocurra darse un beso, recuerden que hablamos de electromagnetismo, no queremos que salgan chispas.
Durante estas tres horas el personal te servirá jugos naturales y frutas frescas, así como infusiones de hierbas naturales. Ya al final de la excursión podrás comer unos bocadillos y ensalada, para luego terminar de disfrutar del viaje como todo un rey o reina con una copa de vino blanco frío.
El pedicure de Nemo
Si te incomoda el hecho de que llegó el día del viaje y no pudiste hacerte el pedicure, no te preocupes más, en la última parada Dr. Fish se encargará de tus pies, solo espero que no seas muy sensible a las cosquillas.
Se trata de un tratamiento de exfoliación, muy exitoso entre los asiáticos, en el que unos pececitos no sólo te dejan los pies lisos, sino que también le aportan Dithranol, una enzima presente en las cremas que mejorar la regeneración de la piel. Su nombre es Garra Rufa, los traen desde Turquía y su misión es retirar la piel muerta, a la vez que dan la sensación de masaje debido al cosquilleo. Sólo es un poco difícil al principio, por eso de las cosquillas, pero luego te adaptas y lo encuentras divertido. Estos peces no muerden, puesto que no tienen dientes, solo succionan la piel.
Costo: U$154 dólares toda la excursión y puedes solicitarlo a través de los turoperadores, hoteles o su Web www. oceanadventures-puntacana.com. Además ofrecen otras actividades temáticas como fiestas en medio del mar o baño con rayas y tiburones.