A la provincia San Pedro de Macorís, el cierre de cinco de sus siete ingenios, le ha dejado un sabor amargo y la ha sumido en un letargo profundo, a pesar de contar con dos cementeras, el parque eléctrico más grande del país y la primera fábrica de corn flake de Latinoamérica, sin embargo, sus pobladores prefieren irse a otras ciudades en busca de lo que ya no encuentran en la Sultana del Este.
Ubicada en la región Este del país, San Pedro de Macorís ha visto decaer el esplendor de que gozaba durante la época en que se convirtió en la cuna de la economía nacional, cimentada en la industria azucarera.
Por aquellos días, en el año 1876, despegó en un crecimiento que parecía indetenible, con la edificación del Ingenio Angelina, al que seguirían, en el año 1879, el Ingenio Porvenir; en 1880, el Ingenio Santafé; en 1881, el Ingenio Consuelo y en 1882, los ingenios Cristóbal Colón y Puerto Rico y en 1892, el Ingenio Quisqueya. Para entonces, era San Pedro de Macorís la plaza comercial más importante y de mayor actividad económica. Algo que ha ido quedando en el pasado.
En ese sentido, el presidente de la Cámara de Comercio y Producción de San Pedro de Macorís, Danilo Miñoso, explica que tanto la caída de la industria azucarera, como el cierre de varias empresas de la Zona Franca, han representado duros golpes a la economía y la vida en general de la provincia.
“Ambas situaciones han obligado a los petromacorisanos a emigrar en busca de las oportunidades que ya no encuentran en su tierra. En la actualidad, la población en el municipio anda por las 193 mil personas y en la provincia 245 mil personas. La población ha venido disminuyendo”, explica Miñoso.
El presidente de la Cámara de Comercio y Producción de San Pedro de Macorís, se quejó de que algunos dueños de empresas de Zona Franca, mantienen las puertas cerradas, sin producir y no ceden esos espacios a otros que sí las pongan a producir.
Despertar
A nivel industrial, explica Miñoso, “Macorís ha venido mejorando”. Cuenta con dos cementeras, el Parque Energético Quisqueya, el más grande de República Dominicana, que aporta al país medio millón de megas. A nivel empresarial también ha experimentado un crecimiento con la reinstalación de las empresas César Iglesias. Desde hace cerca de ocho años, ellos han desarrollado un complejo industrial donde hacen aceite, pastas alimenticias, papel, velas y velones; la planta generadora de energía, Los Orígenes, la primera planta de Corn Flakes de América Latina y próximamente terminarán la fábrica de sopas chinas. También Brugal y Compañía, la fábrica de harina de los Antún, el Ingenio Colón y Ferquido. A nivel educativo cuenta con la Universidad Central de Este y una extensión de la UASD.
Seis proyectos para San Pedro
Los proyectos presentados a las autoridades congresuales y gubernamentales por la Cámara de Comercio y Producción abarcan desde la adecuación del puerto, hasta la remodelación del casco urbano.
El principal proyecto es lograr que el puerto sea adecuado para recibir cruceros, ya que en la actualidad tiene un uso muy limitado. “Ya Puerto Plata tiene su puerto de cruceros. Nosotros tenemos condiciones para eso y llevamos 20 años solicitando que se haga la inversión en el puerto”.
También la terminación del acueducto, del cual se construyó una primera parte, pero con el paso del tiempo ha quedado pequeño y no da abasto para toda la provincia. Otro proyecto es el de las aguas residuales y pluviales, porque cada vez que llueve San Pedro de Macorís se inunda. La construcción del mercado municipal, es otra de las propuestas, para convertirlo en un atractivo turístico y al mismo tiempo que las personas que ofertan sus productos lo hagan de una manera digna. Así mismo, Miñoso explica que el malecón necesita una inversión urgente. Basta una mirada para notar el abandono en que se encuentra y el mal estado de las casetas. La propuesta abarca también el remozamiento del casco urbano. “Es importante que el casco urbano ofrezca una apariencia atractiva para los visitantes”, señala Miñoso. “Patrimonio Cultural a veces pone trabas por tratarse de edificaciones antiguas y no permiten que las toquen, pero están en mal estado y podrían colapsar”, destaca.
Seis años fuera del Presupuesto Nacional
De acuerdo con los datos ofrecidos por la Cámara de Comercio y Producción, las inversiones han disminuido, ya que San Pedro de Macorís lleva cinco años fuera del Presupuesto Nacional, al menos en cuanto a la edificación de infraestructura y afirman que temen que también haya sido excluido del que regirá el próximo año.
En ese sentido, Danilo Miñoso explica que el año pasado, junto a otras instituciones de la ciudad, realizaron una reunión en la Cámara de Comercio, donde establecieron seis proyectos prioritarios para esa ciudad, se lo enviaron al Ministerio de Planificación, y a los congresistas de la provincia, pero no recibieron respuesta.
Sequía
La actual sequía amenaza con reducir la producción de azúcar y acortar la zafra de este año.