Irving Alberti
Padre de: Irving Manuel (Bebo) (19 años), Ágata (12 años) y Luis Felipe (11 años).
Inspiración: Viaje al centro de la tierra 2: La Isla Misteriosa.
¿Qué es lo más chévere de ser padre?
Ser padre es lo único que haces en la vida con desinterés, solamente con el fin de que tu hijo eche para adelante. Es algo que te da motivación y que te anima a hacer un mayor esfuerzo sin querer nada para ti, sino para la otra persona.
Ésta película es de un padrastro aventurero, ¿cuál ha sido la mayor aventura que has vivido con tus hijos?
Cuando nos vamos de viaje, porque hay que llevar a un adulto que nos controle a todos. Cada viaje para nosotros es una aventura, lo vivimos al máximo y lo disfrutamos muchísimo. Sin reglas. Disfruto con mis hijos más que si estuviera con amigos de mi generación.
¿Qué tanto tiempo planeas para esas vacaciones familiares?
Ninguno. Todo lo mío es de hoy para mañana. Es un problema que tengo. A veces la familia dura dos meses planificando un viaje, pero yo no sé si voy hasta dos días antes. No me gusta hacer planes a largo plazo así, porque generalmente no se dan o se complican. Los disfruto más cuando son improvisados y ellos los disfrutan más cuando es una sorpresa.
El personaje de Hank, en la película, tiene problemas con su hijastro adolescente. ¿Qué tal has pasado la adolescencia de tus hijos?
¡Muy bien! Mis hijos son mucho mejores que yo. Mi adolescencia fue más complicada. Por la situación de inseguridad que hay hoy en día, yo en mi adolescencia salía muchísimo más de lo que salen ellos hoy. Estaba en la calle constantemente, había menos miedo y menos peligro, y a veces mis papás ni sabían donde yo estaba. Mis hijos no. Ellos disfrutan tanto salir conmigo, que me ha sido muy fácil. Ellos son tan especiales, que no sé si es que somos buenos padres o que ellos son muy buenos hijos.
Ahora que “Bebo” te está siguiendo los pasos, ¿cómo te sientes al respecto y qué consejos le das?
Me siento feliz y orgullosísimo. El único consejo que siempre le doy es que no importa lo lejos que llegue o lo bien que lo haga, que siempre haga las cosas como el primer día, y que trate a todo el mundo igual. Que cuando él llegue a un canal, tanto su jefa como el portero, son iguales y merecen el mismo buen trato. Que eso no lo pierda nunca. Y que esté preparado para las cosas negativas del medio. Aunque lo positivo es mucho más.
Javier Grullón
Padre de: Noah
Inspiración: The Descendants
En The Descendants, el personaje de Matt King dice en algún momento que, por vivir en Hawai, sus amigos creen que él se pasa el día holgazaneando en la playa. ¿Te pasó alguna vez que alguien no tomara en serio tu trabajo?
Pienso que sí. A veces, los amigos del colegio piensan que el mundo del entretenimiento es sólo un hobby. Igual la gente que trabaja de oficina, a veces no lo entiende. Pero las cosas son difíciles en todos lados. No sé cómo económicamente una persona con un ingreso fijo mensual vive su vida, porque yo tengo otra experiencia con eso, y a veces veo los trabajos “normales”, por decirlo así, como trabajos que tienen un límite. Entonces no me visualizo en un trabajo que no me dé la posibilidad de hacer más. No me extraña que la gente lo considere como un entretenimiento, pero realmente éste es un trabajo que paga.
Tienes la suerte de que por tus padres creciste en este medio, pero ¿alguna vez tuviste un “plan b”?
Siempre he tenido un lado artístico. Desde el colegio, siempre era la persona que estaba ahí si tenían que montar una obra o una coreografía, y era como una habilidad que tenía desde pequeño. Pero nunca imaginé que iba a estar en un teatro y eso. No obstante, una segunda visión que tuve eran los deportes. Siempre fui muy deportista. Jugué mucho béisbol y basquetbol, quizás hubiera seguido una pasión como esa.
La esposa de Matt en la película queda en coma. Eres un joven padre, ¿te ha cruzado por la cabeza pensar qué harías si tuvieras que asumir este rol solo?
La verdad no me ha pasado por la cabeza. Pero si lo pienso, creo que sería muy difícil. Karla es una tremenda madre, que ha estado 100% dedicada a su hijo, más de lo que yo imaginé. Cuando uno tiene un hijo, el instinto de padres sale inmediatamente, porque yo nunca fui bueno con los niños desde bebés, pero con mi hijo fue increíble, parece que siempre lo hubiéramos hecho, tenemos la confianza, tenemos la seguridad. No hay miedo. Noah está en casa desde que nació e imaginarme sin Karla, sería una responsabilidad inmensa. Si tuviera que hacerlo lo haría, pero no me gustaría, porque ese lado materno es muy importante.
¿Qué es lo más chévere de ser padre?
Ver esa cara todos los días sonriendo. Saber que vas a llegar a casa y lo vas a encontrar. Tener esa responsabilidad tan linda. El momento en que nace y ves que esa persona te necesita, todo cambia en el buen sentido de la vida.
Aprecias más a tus padres. Cuando mi hijo nació, a la semana llamé a mis padres y les dije: “yo te amo Pa”, “yo te amo Ma”; porque uno no se da cuenta hasta que no tiene sus hijos del sacrificio que es. No es un sacrificio malo, sino un sacrificio lleno de amor. Mi vida ha cambiado en el buen sentido de la palabra y Noah es la razón.
Raeldo López
Padre de: Gael (2 años y 8 meses)
Inspiración: The Pursuit of Happiness
¿Qué es lo más chévere de ser padre?
Definitivamente es una experiencia enriquecedora. Me gustan mucho los procesos de aprendizaje y ser padre es un gran proceso de aprendizaje, especialmente cuando eres padre tan joven. Yo fui padre a los 23 años y mi hijo me ha enseñado más de lo que yo le he enseñado a él. Uno empieza a pensar más en otra persona que en uno mismo. Y definitivamente es un signo de que todavía Dios está atento a uno y puso un hijo en mi camino para que yo piense en alguien más y no en mí mismo.
¿Cómo la paternidad ha cambiado los hábitos de tu trabajo?
Ahora procuro trabajar menos. Antes tenía un estilo de vida muy acelerado. Me encanta mi trabajo, pero ahora he aprendido a decir más que no, porque honestamente prefiero estar tirado en el suelo comiéndome un mango con él que estar fuera de la casa. Siempre que no estoy trabajando, estoy en mi casa. Si voy a salir y me lo puedo llevar, me lo llevo. Es muy usual que me vean sólo con él en la calle, aunque su mamá esté en la casa. Y todas mis decisiones ahora giran en torno su futuro y el de su mamá. Esto me ha beneficiado enormemente porque ahora estoy trabajando menos y ganando más (risas).
En la película, el personaje de Chris Gardner hace todo por estar junto a su hijo. ¿Qué cosas son las que más disfrutas junto a Gael?
Me gusta verlo disfrutar de la piscina cuando está en natación. Pero lo que más disfruto son las conversaciones que tenemos. Quizás aún él no puede tener una conversación lógica conmigo, pero yo le hablo algo, él me contesta algo totalmente diferente y por ahí continuamos largas conversaciones. Me encanta dormirlo. Y gracias a Dios tengo un trabajo que no demanda mucho de mi tiempo y puedo pasarme mucho tiempo en casa. A veces hace travesuras propias de su edad y su curiosidad y tengo que voltearme para reírme.
La mayor enseñanza del Chris hacia su hijo en la película, es que nunca se rinda. ¿Qué deseas que tu hijo aprenda de ti?
Deseo enseñarle el valor de la responsabilidad y la perseverancia. Yo vengo de muy, muy abajo y, gracias a Dios, la vida me ha permitido darle una vida a Gael mejor que la que yo tuve. Pero eso no significa que le esté enseñando que las cosas son fáciles. Cuando él se cae no voy corriendo a levantarlo. Cuando le digo que no haga algo, y lo hace, si le pasa algo, le digo “arregla lo que hiciste, porque te lo dije”. Independientemente de que tenga dos años y medio hay cosas que él entiende y quiero que aprenda que cuando cometa un error, debe hacer todo lo posible por remediarlo y hacerse responsable de él. Al final la responsabilidad es lo que le abrirá las puertas.
En el filme Will Smith trabaja con su hijo, ¿te imaginas en un futuro trabajando con Gael?
Sí, definitivamente. A veces lo he entrevistado en Chévere Nights. Ojalá que algún día podamos hacer algo juntos.
Estilismo: Enyer Díaz
Fotos: Franklin Marte
Maquillaje: Leisi González
Asistencia: Kate Pedie