Y con mucha razón. ¿Qué mujer –teniendo los medios para hacerlo– no es capaz de invertirlo todo por el ajuar deseado para su gran día? Es así como la historia está llena de ellos, trajes de novia memorables que han marcado un hito y han opacado todo lo demás del momento.
El más recordado de todos los tiempos: Grace Kelly
Todo sobre la boda de Grace Kelly en 1956, fue impactante. La historia de la actriz que se enamoró del príncipe Rainiero, los impedimentos de los estudios MGM para finalizar su contrato y, por supuesto, su vestido. El traje de novia de Kelly llevaba una falda abullonada y encajes de 125 años de antigüedad, diseñado por Helen Rose, diseñadora de vestuario para MGM. Tanto la boda como el vestido marcaron un antes y un después. Se dice que es el vestido más copiado de la historia, y que incluso, la princesa Kate Middleton de Cambridge se inspiró en éste para el suyo propio.
Carrie Bradshaw
Al terminar Sex and the City, Carrie Bradshaw (Sarah Jessica Parker) al fin se casaría con Mr. Big. En 2008, Carrie llegó al altar con un vestido de Vivienne Westwood que le hacía justicia a su pasión por la moda.
Lady Di
Otro famosísimo vestido fue el usado por Diana de Gales para su unión con Carlos de Inglaterra, conocida como “La boda del siglo”. Se casaron en 1981, en la que ha sido la boda europea más cara de la historia (53 millones de euros). Su vestido, diseñado por Bruce Oldfield, llevaba grandes volantes y mangas de farol (consideradas horribles en la actualidad), y una cola de 8 metros de largo. Fue por años, el vestido más copiado en Europa.
Kate Middleton
Actualmente Duquesa de Cambridge tras su boda con el Príncipe Guillermo, en 2011. Su vestido fue comparado por muchos con el vestido de Grace Kelly. Sin embargo, éste fue diseñado por Sarah Burton para Alexander McQueen, con escote en forma de corazón, encaje francés, falda con mucho volumen y una cola de tres metros de largo.
Audrey Hepburn
Para su boda junto a Mel Ferrer, en 1954, Audrey llevó un vestido de falda corte A, diseñado por Pierre Balmain. Su segundo vestido fue aún menos ostentoso, de lana rosa, diseñado por su amigo Hubert de Givenchy, para su boda con Andrea Dotti en 1969.
Jacqueline Kennedy
Para su boda con John F. Kennedy (1953) llevó un pomposo vestido con 50 kilos de seda, diseñado por Ann Lowe. Años más tarde dio el sí a Aristóteles Onassis (1968) con un vestido corto en encaje de Valentino.
Kate Moss
Tras sus altibajos con las drogas y una vez rehabilitada, la supermodelo estaba lista para empezar de cero y con un nuevo amor. Para su boda con Jamie Hince, en 2011, la actriz eligió un vestido de corte sencillo, romántico y con cierto aire de los años 20, detalles en gasa, transparencias y paillettes dorados, diseñado por su amigo John Galliano
Elizabeth Taylor
Hasta la fecha, ninguna mujer se ha casado tantas veces como ella; dijo “sí, acepto” en ocho ocasiones. Su ajuar más famoso fue el primero, para su boda con Conrad Nicholas Hilton, en 1950, cuando sólo tenía 18 años. El vestido de corte imperio fue creado por Helen Rose, quien seis años más tarde también diseñaría el de Grace Kelly. Fue subastado en 2013 por la suma de 143.569 euros.
Fergie
Fergie y Josh Duhamel no son una pareja que constantemente esté dando de qué hablar, pero su boda en el 2009 fue una de las más multitudinarias de Hollywood. Fergie llevó un vestido diseñado por el dúo Dolce & Gabbana, con pliegues, tul y una larga cola.
Letizia Ortiz
La periodista que conquistó el corazón del Príncipe de Asturias, es hoy Reina de España. Se casaron en mayo de 2004. Ella llevó un traje de corte elegante, tipo túnica, en color marfil, y bordados dorados. Fue una creación de Manuel Pertegaz.
Kim Kardashian
A pesar de los tortuosos finales de sus relaciones anteriores, la relación de Kim Kardashian y Kanye West se mantiene. Kim aceptó ser la esposa de Kanye este año, en una comentada boda llevada a cabo en Florencia, Italia. Para esta segunda gran boda, la famosa socialité llevó un ajustado vestido corte sirena cubierto de encaje, transparencias y un pronunciado escote en la espalda, diseñado por Ricardo Tisci para Givenchy.
Thalía
El vestido que lució la cantante y actriz mexicana para su boda con Tommy Mottola en el año 2000 llevó una cola de nada más y nada menos que ¡16 metros de largo! ¡Todo un récord! Fue diseñado por el mexicano Mitzy, con 33 kilos de pedrería y algunos diamantes. También llevaba bordadas las iniciales “T&T”.
Bella Swan
Twilight fue una saga que enloqueció a las adolescentes y, por qué no, a más de una mujer madura. La secuela Breaking Dawn finalmente presentó la boda entre Bella y el vampiro Edward Cullen. El vestido fue un diseño de Carolina Herrera, con mangas largas y espalda abierta.
Amal Alamuddin
La abogada ha sido la única mujer capaz de arrebatar la soltería de George Clooney y llevarlo al altar. Pero también su vestido, cubierto de encaje francés bordado en la India y apliques de perlas y cristales, pasa a la historia para convertirse en el último vestido de novia con la firma auténtica de Oscar de la Renta.
Yoko Ono
De Yoko Ono y John Lennon no podía esperarse menos que algo totalmente fuera de lo convencional. Para su boda en 1969, ella llevó un vestido corto, sombrero, medias hasta las rodillas y cómodos tenis. Todo de blanco.
Mia Farrow
Se casó a los 21 años con Frank Sinatra, cuando él tenía 50 años. De estilo singular para la época, Mia lució su corte estilo pixie con un sencillo traje de chaqueta y falda.
Rania de Jordania
Una de las reinas más queridas del mundo. A sus 23 años, se casó con Abdallah en 1993 con un vestido de mangas cortas con bordados en oro, diseñado por Bruce Oldfield.
Angelina Jolie
Los últimos años han sido duros para la actriz. Su doble mastectomía, rumores de divorcio y otras situaciones amenazaban su estado emocional. Sin embargo, en agosto de este año, ella y Brad Pitt decidieron reafirmar su amor casándose formalmente en una boda muy íntima. Para la ocasión, la actriz eligió un vestido de Versace, con detalles en el velo pintados por sus seis hijos.
Bianca Jagger
Dio el sí a Mick en 1971, con un look que sentaría un precedente: chaqueta masculina, falda midi y sombrero con velo. Sin dudas, un a apuesta con sello propio.
