Roberto del Castillo se inicia en el arte en el Coro la Amistad de su pueblo natal, Hato Mayor del Rey. Luego, participa en varios festivales locales y regionales, en los que siempre fue el ganador del primer lugar. En una de las fiestas patronales de su pueblo, tocó la orquesta de Johnny Ventura, y un amigo en común le pidió que cantara una canción con la orquesta, a lo que accedió, “cuando terminé, el “caballo mayor” me pidió otra canción, y de ahí en adelante la historia está escrita, pasé a formar parte de la orquesta hasta el día de hoy”, cuenta Del Castillo. A la pregunta de cómo se desempeña en eso de ser cantante, comunicador y animador de tarima, nos dijo: “Repartiendo adecuadamente mi tiempo y, además, separando los linderos”.
Cuéntanos acerca de tu oficio como comunicador, ¿cómo llegas a la TV?
Me inicié como comunicador en el canal 4 con Ramón Colombo, quien era director de esa planta televisora. Decide poner en mis manos un proyecto llamado ‘La Fiesta del Consumidor’, bajo la producción de Ángel Puello, y luego paso a ‘La Alegría del Mediodía’, en el canal 33. Una tarde de un domingo recibo la llamada de un gran amigo, el empresario Luis Medrano, quien me comunicó que me recomendó para formar parte del elenco del ‘Show del Mediodía’, y que en unos minutos me llamaría don José Augusto Thomén, propietario del programa. Thomén me llamó y nos pusimos de acuerdo. Mi oficio me encanta, de hecho, soy locutor, y quiero realizar en un futuro mis proyectos de televisión.
¿Qué ha significado el Show del Mediodía para ti?
En verdad la experiencia en el show ha sido maravillosa, es la universidad de los programas de variedades de la televisión dominicana, con 46 años en el aire. Es el lugar donde se han formado todas las grandes figuras de la televisión dominicana, es un gratísimo honor para mí ser parte de la familia Televisa, y me siento orgulloso de la responsabilidad que día tras día don José Augusto Thomén deposita en mis hombros.
Cómo te desempeñas en eso de ser cantante, comunicador y animador de tarima?
Repartiendo adecuadamente mi tiempo, y además separando los linderos. Soy organizado en mi profesión y me encanta agendarme: ya sea cantando con Johnny Ventura, o como solista en mis shows, comunicador en el Show del Mediodía de lunes a viernes, animador cada vez que me contratan…, y eso me encanta. Jajaja….
En el plano musical, ¿qué significa Johnny Ventura para ti?
Uno de los más grandes exponentes de nuestra música, el merengue. Para mí el ADN del mismo, y personalmente mi mentor y profesor como artista, el merenguero de los dos siglos y una gloria nacional. Es mi segundo padre y uno de los mejores seres humanos que conozco.
Te independizaste con tu proyecto en solitario “Punto Blanco”. ¿Qué pasó, por qué no funcionó y tuviste que volver con Johnny Ventura?
Fue un proyecto piloto de la empresa Alegro Production con mi amigo Johnny Montaño, en épocas de receso de Johnny Ventura, pero siempre estuve ligado al “Caballo”.
En la actualidad se dice que el merengue está en crisis, comparado con la época de Johnny y otros grandes merengueros. ¿Qué opinas?
Para mí no, quizás no esté en su mejor momento de promoción en los medios de comunicación, pero los bailes están llenos, la agenda del “Caballo” está llena, y por lo que siento en la publicidad de actividades, los demás grupos también están activos, creo que lo que falta es más presencia en los medios de comunicación.
Deseo
Mi mayor satisfacción es no defraudar nunca a todos los que han depositado su confianza en mí, y levantar con honestidad a mi familia”.