La artista dominicana exhibe su más reciente exposición “Let It Be”, con el ímpetu de presentar lo que para ella es el origen. Una muestra reflexiva que cruza la contemporaneidad. Ferreras brinda en cada una de sus piezas un lenguaje estético y estados de confort visual. En fin, esta exposición es una reflexión sobre el tiempo, son vidas y momentos que existen en el arte, en la vida de Mónica Ferreras. La artista afirma que sí, claro que sí. Como en todo, conlleva un sacrificio en los primeros años, el compromiso propio, la seriedad. Sumado a todo esto, la perseverancia para esperar que a una le llegue su momento y que, además, está muy feliz de haber sido seleccionada para la nueva edición del Concurso de Arte León Jimenes.
Antes de iniciar es importante saber ¿quién es Mónica Ferreras?
Soy una artista visual nacida y criada en Santo Domingo. Estudié Bellas Artes e Ilustración en la Escuela de Diseño de Altos de Chavón y luego estudié Diseño de Ambiente en la Real Academia Holandesa de Bellas Artes, La Haya, Holanda. En el 1995 es cuando inicio, por decir de una manera, mi carrera como artista visual con una exposición en la ya desaparecida pero muy puntual en su momento Galería Art Nouveau. A parte de eso, soy hija, hermana, tía, amiga y muchas cosas más.
¿Cuál es el concepto de arte para usted?
Para mí el arte es comunicación. Transmitir ideas, sentimientos, crear emociones, cuestionarme y dialogar.
¿Qué opina de las diversas expresiones del arte contemporáneo?
Es maravilloso, precisamente por esa diversidad que pueda conjugar en sus lenguajes. Nos da una libertad nunca gozada por el artista.
¿Cómo llegas al lenguaje de la abstracción?
Realmente nunca me gustó el realismo o lo figurativo, aunque lo respeto. Que no me guste no significa que sea mejor o peor. La abstracción va con mi forma de ser y de ver el mundo.
¿Qué técnicas plásticas utiliza mayormente en su taller?
Trabajo la acrílica sobre tela. También la acuarela, tinta y lápiz de color sobre papel. Todo esto refiriéndome a las obras bidimensionales. Además, hago instalaciones y video arte.
¿Cómo organiza sus exposiciones?
Aveces las he organizado yo sola solicitando espacios, como el Centro Cultural de España, que, claro, colaboran también con la producción. Otras veces la produce la galería, como es el caso de la exposición que se muestra actualmente “Let It Be”, bajo la dirección de mi galerista Lucy García.
¿Cuáles son las etapas en que se dividen sus cuadros y exposiciones conceptuales y las particularidades de cada una de ellas?
Tengo 12 exposiciones individuales y es un poco difícil hablar de cada una de ellas de manera particular y detallada para esta entrevista. Pero, podría decir que con la pintura y el dibujo se puede ver una constante con respecto a que siempre ha tenido conceptualmente un componente autobiográfico y formalmente la abstracción ha predominado. En estas obras he hablado de mis procesos, dónde estoy, cómo me siento, entre otras. En las instalaciones y en el video-arte ha predominado el componente social de denuncia, si se quiere. También, en sentido general, he trabajado mucho sobre los conceptos de la psicología analítica de Carl Jung.
Actualmente presenta “Let It Be”, háblenos de esta nueva exposición. ¿De qué se trata?
En esta exposición presento un nuevo cuerpo de trabajo, todo pinturas, unas realizadas durante la residencia que agoté en New York, otorgada por la Davidoff Art Initiative durante los meses de septiembre y noviembre del 2013, y otras realizadas a mi regreso. Aquí hablo de una nueva etapa de mi vida y cito:
«Con estas obras hago literalmente un paralelo de cómo veo y siento que mi vida se está desarrollando y de cómo construyo las pinturas. El uso del color y de las densidades también está en total relación con la narrativa. Podría ser visto como: de lo difuso hacia la claridad; de la negación a la aceptación; del caos hacia la sutil disipación del mismo. Un aprender a dejar ir la ilusión de control para vivir en un dejar ser. Un compromiso al ejercicio diario de fluir con la danza sabia, bondadosa y generosa del universo.
Ha sido seleccionada para la nueva edición del Concurso de Arte León Jimenes, ¿cuáles son sus expectativas para esta versión?
Estoy muy feliz de estar entre los 14 seleccionados de 134 portafolios que fueron enviados. Ya de por sí es una gran satisfacción y, claro, que un premio sería lo mejor.
Creencia
Prefiero no especular sobre las motivaciones de otros artistas a la hora de crear. Yo trabajo motivada por mi necesidad interna”.
Distinciones
Soy un ser humano y como tal, el reconocimiento es motivo de alegría y un estimulante importante”.
