Su labor filantrópica lo ha hecho merecedor del cariño, el respeto y la admiración del pueblo dominicano, que ve en él un apoyo para sanar sus quebrantos.Se trata del doctor Félix Antonio Cruz Jiminián (Antonito), uno de los tres candidatos a Defensor del Pueblo. Nació el 19 de noviembre de 1951 en una comunidad de Jarabacoa de donde se mudó, junto a su familia, a Bonao cuando apenas tenía cuatro años. Al cumplir 12 años se mudaron al populoso sector de Cristo Rey, donde ha desarrollado su vida y tiene su fundación.
Su vocación es servir sin esperar nada a cambio. Impulsado por esa filosofía ingresó al seminario donde se preparaba para ser sacerdote, pero luego descubrió que su pasión era la medicina.
Se graduó de doctor en medicina en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) en el 1980, después de mucho sacrificios. Debido a las limitaciones económicas de su familia, estudió con los libros de sus amigos, algunos de los cuales son sus compañeros en la clínica que lleva su nombre en Cristo Rey.
Nunca pudo comprar su anillo de graduación porque no contaba con los recursos para ello.
Cruz Jiminián decidió enfrentar su situación e hizo, con sus propias manos, un pequeño consultorio con una camilla de madera y un viejo escritorio.
Vocación de servicio
Su desinterés por el dinero y su vocación de servir a los demás lo llevaron a mejorar la salud de mucha gente que, desde entonces, lo han visto como “el médico de los pobres” y a través de los años creó lo que es hoy la clínica más popular de la zona norte de la capital con especialidades en cirugías de labios leporino, paladar hendido, ano imperforado, hidrocefalia, doble sexo, problemas renales y otras patologías.
La labor de Cruz Jiminián ha trascendido el ámbito de la salud y desarrolla campañas y operativos en favor del medio ambiente. También trabaja de cerca en el aspecto judicial mediante el respaldo a la Fiscalía Barrial de su comunidad.
Por todas esas y otras razones ha recibido reconocimientos de distintas entidades públicas y privadas como el Senado de la República que en 1995 lo declaró “Médico del Pueblo” y posteriormente recibió el doctorado Honoris Causa por la Universidad Central Dominicana de Estudios Profesionales (UCDEP.
Numerosos programas de televisión nacionales e internacionales han reconocido su labor en favor de los pobres. En su fundaciónrecibió la visita de los expresidentes Joaquín Balaguer, Hipólito Mejía, Leonel Fernández, así como del fenecido exvicepresidente Jacinto Peynado; Jaime David Fernández Mirabal y José Francisco Peña Gómez.
Durante su tiempo libre tiene como hobbie el cultivo de plantas frutales y medicinales en el patio de su residencia. Dice que eso lo relaja y lo hace retornar a su niñez en su campo de Jarabacoa.
Una meta
Para Cruz Jiminián, ser Defensor del Pueblo es una meta por cumplir, aunque para muchos, ya ha sido defensor de los desposeídos durante muchos años.
Entiende que desde ese espacio puede hacer más por el pueblo porque contaría con un presupuesto, un personal de apoyo y su trabajo tendría el aval del Estado.
El doctor Félix Antonio Cruz Jiminián fue el último evaluado por el Senado de la terna que le envió la Cámara de Diputados.
Defensa
Desde que inicié mi carrera, llevo más de 30 años como defensor del pueblo y seguiré sirviendo y defendiendo al pueblo dominicano”.
Compromiso
No estoy obsesionado por el cargo, pero no debo renunciar a mi candidatura, ya que más de dos mil instituciones me lo pidieron”.