Minutos antes de la Alfombra Roja de los Premios Soberano, conversamos en exclusiva con el diseñador de joyas, Marco Dal Maso.
Abierto y espontáneo, su particular visión del sentido de los accesorios es clara: en las joyas debe brillar la personalidad. Así nos lo hizo saber en sus respuestas, durante su reciente visita a Santo Domingo.
Sus joyas, firmadas bajo el nombre Marco Ta Moko, estuvieron presentes en tan importante premiación, en la figura de cuatro dominicanas destacadas en el arte y el espectáculo: Milly Quezada, Nikauly de la Mota, Evelina García y Daniela Espinal; tres de ellas vestidas por el diseñador Keyther Estévez.
Un trabajo que confiesa fue muy interesante, pues le permitió involucrarse un poco más con nuestra cultura y la efervescencia de la mujer local.
Tu carrera como diseñador de joyas inició a raíz de un “viaje espiritual”, según cuenta tu biografía, ¿cuéntanos al respecto?
Siempre he creído que cuando haces algo debe ser porque te sientes impulsado a ello por tus sentimientos, y que lo que creas, debe ser una expresión de ellos . Vengo de una familia de joyeros, mi papá comenzó en este negocio hace mucho tiempo y crecí en este ambiente. Pero tenía muchos sueños diferentes y por mucho tiempo preferí hacer otras cosas, pero al final era como algo que tenía en mi ADN.
Entonces me di cuenta exactamente mientras estaba en Nueva Zelanda. Allí conocí la cultura Maori, en la cual las personas se tatúan el cuerpo y la cara, tanto las mujeres como los hombres, y estos tatuajes se llaman Ta Moko. No se trataba de simples pinturas, sino de algo que describe todo respecto a la vida de dicha persona. Es una manera de ellos mostrar quiénes son. Entonces pensé que eso era lo que yo quería hacer, piezas que representen al hombre o la mujer que las use.
¿Cómo puede la gente relacionarse con esto?
Si te fijas, mi logo son dos pequeñas comas opuestas. En la cultura Maori, una coma es una persona. Entonces al poner dos, decidí representar cómo todos estamos conectados en este mundo.
Entonces plasmo diferentes inscripciones, pero al final lo que sugiero es que cada uno debe seguir su propio sendero e interpretarlos como desee. Sentirse bien con quien es y con lo que usa, saber por qué le agrada la persona que ve cada vez que se mira al espejo y que al usar una pieza determinada, ésta se vuelva parte de sí.
¿En qué te inspiras?
Todas mis joyas están basadas en la gente. Por ejemplo, las joyas que he traído para Milly Quezada, las creé pensando en una persona alegre y movida, ella es la “Reina del Merengue”, entonces sus piezas deben ser exactamente una expresión de sí misma.
Creo que cada pieza tiene que congeniar con la persona que la usa de otro modo, será algo que no irá consigo y la gente pensará “qué rayos está usando”. Todo tiene que ser pensado primero y luego aplicado, de otro modo no hay conexión.
¿Cómo fue este proceso de crear estas joyas particulares para estas cuatro dominicanas?
Fue un proceso interesante, porque no estaba tan familiarizado con Santo Domingo. Aunque en mi país se conoce mucho la isla para vacacionar y conozco el merengue, pero nunca había tenido mucho contacto con la gente y la cultura.
Entonces las conocí a través de Keyther, quiénes son, qué hacen… Lo primordial para mí era ver a cada una, ver la energía que emanaban, para poder entender qué tipo de piezas iba a poner en ellas, esa fue la base. Luego conocerlas en persona fue muy emocionante, porque al ponérselas vi que le sentaban bien y que hicimos la selección correcta.
Descríbenos cada una dichas piezas que llevaron en los Premios Soberano.
Milly Quezada usó un hermoso conjunto de piezas en oro negro, con un toque de topacio verde y diamantes, con unos toques de violeta en topacio también. La inspiración es precisamente el Caribe, el verde, el brillo de la luz, y todo hace un fuerte contraste con el oro negro. Entonces es una combinación que ilumina una piel trigueña de ojos oscuros.
Nikauly De la Mota llevó piezas en oro rosado y diamantes, con inspiración floral, que combinaban también con su vestido.
Las joyas de Daniela Espinal también resaltaban por predominar en ellas el oro negro, combinado con diamantes blancos. La manera en que los usó, dada su jovialidad y su belleza, resaltaba las piezas.
Evelina García estrenó un nuevo corte de cabello, así que todo su estilo cambió. Sus piezas fueron una combinación de topacio, amatista, granate, oro rosa y oro blanco, con un estilo clásico, que aún si ella no es una persona muy clásica, creaban un contraste interesante y armonioso.
En general, ¿cuál es el perfil de la mujer que usaría tus piezas?
Normalmente son mujeres que no son comunes, porque no hacemos piezas comunes sino que nos consideramos un poco extravagantes. Tiene que ser una mujer de carácter firme, el rango de edad puede estar entre 30 y 60 años, pero sobre todo debe ser alguien con una personalidad única. Creemos en que cada quién es único a su manera y que con la correcta pieza de joyería puede resaltar esa singularidad.
¿Cuándo conoces a alguien, puedes decir algo de su personalidad a partir de los accesorios que lleva puestos?
(Risas) La verdad es que trato de no hacer una especie de diagnóstico ni psicoanálisis sobre lo que alguien lleva. Claro que puedes decir mucho de alguien cuando lo tienes en frente de ti, pero también me gusta creer que puedes ser alguien diferente a lo que pienso y diferente de lo que vistes. Y que puedes ser una persona con la personalidad para llevar una pieza de Marco Ta Moko.
Los hombres dominicanos no usan muchos accesorios realmente…
…¡Los haremos usar todo!
…Tú llevas varios accesorios, que puestos en conjunto no se ven nada mal, ¿cómo te diriges a este blanco de público?
Pasa no sólo en República Dominicana. Viajo mucho y noto que los hombres no usan muchos accesorios aún si les gustaría. La mayoría sólo llevan reloj. Pero al mismo tiempo he descubierto un deseo constante en los hombres de encontrar piezas para ellos. Y eso es lo que pasa, no hay muchas opciones. Las mujeres pueden usar mil cosas y encuentran algo donde quiera, pero si un hombre quiere encontrar algo, debe hacer una búsqueda más profunda.
Entonces estamos encarando esa falta de opciones y es lo que la marca Marco Ta Moko pretende lograr, llenar esa brecha y esa necesidad de los hombres en el mercado de la joyería. Es sólo una cuestión de familiaridad.
Descubre más sobre el trabajo de Marco Ta Moko en su website.
