La lista de aspirantes a las altas cortes depositada en la Secretaría del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) la conformaban hasta ayer 112 personas, en su mayoría propuestas por entidades académicas, de la sociedad civil, gremios profesionales y organizaciones religiosas.
Para ocupar un puesto en la Suprema Corte de Justicia (SCJ), los postulantes suman 58; para el Tribunal Constitucional 18 y 22 para el Tribunal Superior Electoral.
Además, figuran 14 aspirantes que depositaron su currículo, pero sin especificar el tribunal en el que desean trabajar.
En el listado, los proponentes van desde asociaciones empresariales hasta personalidades de la vida pública nacional, como el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, quien sugiere a Sonia Espejo Rodríguez, procuradora fiscal del Tribunal de Niños, Niñas y Adolescentes del Distrito Judicial Valverde, como jueza de la SCJ.
Hay otros candidatos, como la ex miembro de la Junta Central Electoral (JCE), Aura Celeste Fernández, que en vez de tener un postulante tiene 19 entidades presentándola para la SCJ.
La aspirante Guillermina Marizán Santana, jueza del Tribunal Superior de Tierras del Departamento Central, se une a Fernández como uno de los candidatos que más entidades buscó para que respaldaran su objetivo de ocupar un lugar en la Suprema Corte de Justicia. Esta solicitante está siendo propuesta por 13 organizaciones, incluido el Arzobispado de San Francisco de Macorís.
Subero aboga por magistrados de carrera
El presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa, dice que particularmente no tiene objeción con que políticos conformen los altos tribunales. Pero tiene sus aprehensiones. “Yo personalmente no les tengo miedo a los políticos.
Lo que tengo miedo es de que lleven la política a los tribunales”, apuntó. Precisó que lo que no debe tener presencia en las altas cortes es la política partidista.
Entiende que si la administración de justicia es con criterios eminentemente políticos, esto podría influir en la imparcialidad del sistema judicial. “La posición mía con respecto a la Suprema Corte de Justicia sería que, conforme a la Constitución, la mayoría de los jueces que van a recomponer a la Suprema Corte sean jueces de carrera. Eso es lo ideal, y debería hacerse así”, dijo.
Presenciade políticos
Una cantidad importante de los abogados que anhelan laborar en las altas cortes son activistas políticos reconocidos o, al menos, se han identificado como simpatizantes de algún partido. Esto ha dado lugar a un debate entre quienes defienden el derecho de éstos y quienes se oponen.
