Santiago. Fueron traslados a distintos centros privados de aquí, los 28 obreros que enfermaron cuando limpiaban los respiraderos de la presa de Tavera en el municipio de Sabana Iglesia.Los trabajadores que llevaban más de 41 días trabajando en dichos túneles vieron empeorar su cuadro clínico por lo que este martes vario de ellos fueron ingresados a cuidados intensivos, incluyendo algunos que ya habían sido enviados a sus casas.

Aunque en principio se habló de una posible intoxicación, la directora de hospital de Sabana Iglesia descartó ese diagnóstico. Loida Luis King informó que por los diversos síntomas, los obreros pudieron haberse contagiado de leptospirosis, histoplasmosis, aspergilosis u otro virus.

Los afectados presentan dolor de estómago, de cabeza, náuseas, mareos, fiebre, dolor estomacal, entre otros.Se presume que los obreros fueron afectados por los gases que desprenden las heces de murciélagos, ratas, cucarachas y otros insectos. 

Santiago.- Fueron traslados a distintos centros privados de aquí 28 obreros que enfermaron cuando limpiaban los respiraderos de la presa de Tavera en el municipio de Sabana Iglesia.

Los trabajadores que llevaban más de 41 días trabajando en dichos túneles vieron empeorar su cuadro clínico por lo que este martes algunos fueron ingresados a cuidados intensivos, incluyendo otros que ya habían sido enviados a sus casas.

Aunque en principio se habló de una posible intoxicación, la directora de hospital de Sabana Iglesia descartó ese diagnóstico.

Loida Luis King informó que por los diversos síntomas los obreros pudieron haberse contagiado de Leptospirosis, Histoplasmosis, aspergilosis u otro virus.

Los afectados presentan dolor de estómago, de cabeza, náuseas, mareos, fiebre, dolor estomacal, entre otros.

 “El mal olor que hay en esos túneles es tan fuerte que aun después de lavar la ropa que nosotros usamos no se le quita y nosotros ya con tantos días respirando ese aire imagínese”, dijo uno de los afectados a reporteros de Multimedios del Caribe.

Se presume que los obreros fueron afectados por los gases que desprenden las heces de murciélagos, ratas, cucarachas y otros insectos que habitan en los túneles.

Según versiones de los mismos afectados para penetrar a los túneles solo usaron cascos y bombillas pero no fueron dotados de guantes ni cubrebocas.

Aunque reiteraron que laboran para el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRHI), el director de esa dependencia estatal Olgo Fernández dijo que las labores de limpieza no fueron ordenadas por esa entidad.