El Pentágono enviará en los próximos días hasta 1.500 soldados en servicio activo para ayudar en las labores de protección de la frontera de EE.UU. con México, informaron funcionarios, que hablaron bajo condición de anonimato, a la agencia AP.
De esta manera, se pondrían en marcha los planes del recién posesionado mandatario estadounidense, Donald Trump, quien, poco después de asumir el puesto, declaró una “emergencia nacional” en la frontera sur y presentó órdenes ejecutivas para frenar la migración a su país.
Según el citado medio, se estimaba que el secretario de Defensa en funciones, Robert Salesses, firmara este miércoles las órdenes para el despliegue de los uniformados; no obstante, todavía no se sabía qué tropas serían las destinadas para esta tarea.
El nuevo contingente se uniría a los alrededor de 2.500 efectivos de la Guardia Nacional y la Reserva de EE.UU. que se encuentran en la zona; y se prevé que estos uniformados sirvan de apoyo a los agentes de patrulla fronteriza, haciendo tareas de logística, transporte y construcción de barreras.
Ya otros soldados han desempeñado tareas similares en el pasado reciente, cuando tanto Trump como el ahora expresidente Joe Biden (2021-2025) destinaron tropas en servicio activo al cuidado de la frontera.
Aunque las leyes estadounidenses prohíben a estos uniformados llevar a cabo tareas de aplicación de la ley, eso podría cambiar en la nueva era Trump. El mandatario ha instruido a sus funcionarios para que, en un plazo de tres meses, informen si consideran necesario invocar la Ley de Insurrección de 1807, lo que permitiría que los uniformados desempeñen esas funciones que hasta ahora les están prohibidas.