Leer las instrucciones de la cajita es sencillo. La información está ahí, sólo hay que seguir el paso a paso. Sin embargo, hay detalles que puedes tomar en cuenta para optimizar el color, y de paso, proteger tu cabello. Vanessa Sulbarán, de Art Beauty, enumera el decálogo para ser una “pro” en tintes caseros.
1. Tener el cabello sin lavar por máximo tres días.
2. Proteger la piel de manchas con vaselina o aceite de bebé, específicamente los bordes de la frente, las orejas y el cuello bajo. No querrás teñir tu piel.
3. Dividir el cabello en 8 secciones (preferiblemente con mariposas o pinzas).
4. Comenzar con las secciones del cuello hasta llegar a las de la frente.
5. Colocar la mezcla de raíz a puntas y masajear la sección en la misma dirección por 30 segundos para unificar el color y evitar manchas o diferencias en el tono.
6. Si el efecto deseado es de baño de color (relleno), dejar actuar por 15 minutos.
7. Si el efecto deseado es cubrimiento de canas y coloración máxima dejar actuar por 35 minutos.
8. Al concluir el efecto deseado y el tiempo indicado, colocar champú puro en el área donde se colocó la vaselina o aceite de bebé, y retirar con abundante agua, preferiblemente fría para sellar la cutícula de la hebra.
9. Lavar el resto del cabello con tres sesiones de champú hasta ver el agua clara o totalmente transparente.
10. Colocar acondicionador para desenredar el cabello. Secar con toalla de color, preferiblemente, para que no manche la blanca.