Confieso que no he aprendo a “contar hasta diez”, este consejo que a menudo nos ofrecen con la esperanza de que veamos mas allá de nuestras narices y no nos dejemos llevar por nuestros impulsos.Quien no ha escuchado a alguien pedirle que antes de actuar o de hablar, movidos por el impulso de un momento, por la rabia de alguna situación que nos desagrada, contemos hasta diez.
Es decir, nos invitan a no actuar por impulso. Siempre he escuchado a algunas personas decir que las palabras no se recogen, que después que hieres profundamente a otro, no importa cuánto te arrepientas, la herida queda.
Personalmente pienso que si existe una relación de sinceridad y verdadero amor, siempre hay perdón, pero también pienso que precisamente por ese amor debemos aprender a contar hasta diez, debemos pensar antes de hablar, no pensar para elegir palabras convenientes o para decir medias verdades.
Para eso no, se trata de pensar para ver mas allá de lo que las apariencias nos muestran, para no hacer caso de los fantasmas que nosotros mismos creamos, que no existen pero que nosotros nos empeñamos en ver.
Aprender a pensar antes de hablar o de actuar no solo nos hará personas más felices, sino que nos convertirá en personas mas agradables ante los demás. Sé que así es, y por eso sigo tratando y veo que no es tan difícil y menos si sé que al final de cuentas yo seré la más beneficiada.
Producto del dolor decimos y hacemos tantas cosas que terminan afectándonos a nosotros, cuando el objetivo era esa persona de quien creemos que hemos recibido la herida que nos causa el profundo dolor que nos lleva a escribir unas líneas y a decir unas cuantas frases, que cuando lo analizamos fríamente, tenemos que reconocer que cometimos una gran injusticia. Y no es que al decir todo esto olvide que quien actúa de forma impulsiva, sin detenerse a ver objetivamente la realidad, sufre aún más que aquel que es objeto de sus ataques.
Yo sigo tratando, y lo lograré, porque sé que es esencial para mi salud emocional y para el bienestar tanto mío como el de las personas que más amo.