Se dice en muchos ambientes, y por personas de espectros muy distintos, la siguiente frase: “No le tengo miedo a la competencia, sino a la incompetencia”.
Las competencias son buenas porque ayudan a superarse continuamente y a medirse con otro de nivel similar. La competencia incentiva la creatividad y la innovación en todo. Por ejemplo, Samsung y Apple compiten e innovan para producir el mejor celular del mundo aplicando nuevas tecnologías, y dos equipos de fútbol americano buscan nuevas estrategias y jugadas para poder aprovecharse de sus debilidades. Cuando hay una competencia un poco más intensa y agresiva, se le llama rivalidad. Estas rivalidades, aparte de que aumentan el entusiasmo por el deporte, nos han traído formas de juegos que nunca se habían visto antes.
Las jugadas ofensivas que se perciben en algunos juegos, como los de Washington, son cada vez más creativas y más eficientes. Éstas buscan la mejor manera de aprovecharse de sus atletas y explotar sus habilidades. Son como un híbrido entre el fútbol tradicional y un juego moderno donde las posiciones pueden variar para confundir a sus adversarios.
El fútbol moderno que hoy percibimos es gracias a la creatividad debido a la alta competencia del deporte en las últimas décadas.
La temporada regular de la NFL acaba con la mayor rivalidad del deporte. Dallas Cowboys contra
Washington Redskins es como NY Yankees y Boston Red Sox o Águilas vs Licey en la pelota invernal.
Alrededor de la liga
Las cosas están muy definidas, 10 de los 12 pases para enero están definidos y los faltantes son de la Conferencia Nacional. El ganador de Washington y Dallas gana la división Este de la Conferencia Nacional. El otro puesto es para el segundo comodín que se lo disputan Minnesota y Chicago. Washington aunque pierda, pudiera conseguir el segundo comodín si Minnesota y Chicago pierden.
Atlanta y Green Bay aseguraron su división y San Francisco y Seattle aseguraron su entrada a la postemporada, aunque aun el campeón de la división no se ha definido. Si San Francisco pierde y Seattle gana, Seattle se queda con la división.
Predicciones (27-21): Chicago, Dallas, Baltimore.