La Policía persigue a un hombre conocido como Polo, acusado de prestarle el arma a un niño de 5 años para que matara a un señor en San Francisco de Macorís.
El niño será sometido a una prueba de absorción atómica a parafina, procedimiento científico para examinar residuos de pólvora en las manos de quien se supone disparó un arma de fuego.
El pequeño de cinco años enfrentará esta experiencia tras convertirse en el centro de la investigación del homicidio de Arsenio Díaz Rodríguez, un hombre bien conocido en San Francisco de Macorís y quien habría sido deportado desde los Estados Unidos, donde cumplió una condena de 10 años por narcotráfico. Díaz Rodríguez murió fulminado por un proyectil que le penetró en el tórax. Vivía en la calle Colón número 45, del sector 27 de Febrero.
La versión manejada por la Policía es que la bala que mató a Díaz Rodríguez salió de una pistola que poseía un infante de cinco años, que se la había prestado un hombre identificado como Polo.
Supuestamente, Polo le dio el arma al menor para que asustara a Díaz Rodríguez cuando entrara a su residencia. La Policía no explica si el niño tenía algún parentesco con Díaz Rodríguez. “De acuerdo a los reportes, corroborados por los padres del menor, tras ocurrir el hecho el tal Polo le quitó la pistola al niño y se marchó del lugar a bordo de una motocicleta marca Yamaha RX115, roja y negro”, informó el vocero de la Policía, general Máximo Báez Aybar.
