La aparición de una gran cantidad de algas marinas en la playa Casita Blanca de Barahona mantiene alarmados y preocupados a los pobladores de esta zona en el sur del país.
Las algas, que se mueren y se descomponen al llegar a la costa, emanan un fuerte hedor que provoca nauseas, mareos y vómitos a residentes cercanos a la costa.
El comercio, fundamentado en hoteles y restaurantes, ha resultado afectado también por el mal olor de la playa.
La pestilencia con características de sulfuro, por la presencia de azufre en las algas, oscurece joyas y prendas preciosas, afirman ciudadanos consultados por elCaribe.
Estas algas provienen del mar de Los Sargazos y son arrastradas al litoral sureño por las corrientes marinas de los océanos, según el ecologista y profesor universitario Rafael Matos Féliz.
“Estas algas solo están presentes en la ensenada de la playa Casita Blanca, donde el oleaje es ligero. Si visitas la zona de Los Patos y San Rafael, no notarás la existencia de estas algas, debido a que el oleaje en fuerte y constante”, dijo Matos Féliz.
Pero en la población existe la versión de que se trata de una embarcación colombiana que habría depositado este desecho en aguas cercana y el viento las ha arrastrado hacia el litoral.
La zona de Casita Banca es visitada con frecuencia por los barahoneros, pero en los últimos días ha descendido la afluencia de personas a esta área de esparcimiento.
Los pobladores se quejan de que ninguna autoridad ha tomado medidas para retirar estas plantas marinas que se mueren al llegar a la costa. Hay personas que tienen problemas respiratorios y de asma.
Manuel Segura, un ciudadano de Barahona que resguardaba en una sombra frente a la playa afectada, dice que ninguna autoridad interviene para resolver el problema.
“La joyas de las mujeres se ponen prietas y los niños tienen mareos y vómitos por el tufo que sale de esas algas”, exclama Santos Rivas, residente en Barahona.
Sin embargo, el ecologista Rafael Matos Féliz precisa que los ministerios de Turismo, Medio Ambiente y Agricultura han recolectado las algas y las amontonan en la playa a la espera que se sequen y luego las trasladan a otro lugar.
Matos Féliz propone que se utilicen los chinchorros de los pescadores para limpiar el litoral marino.
El mar de Los Sargazos está localizado en la parte media del océano Atlántico. Se caracteriza por su vegetación flotante, que es confinada allí por la habitual ausencia de vientos y de corrientes marinas.
Pero las algas de Los Sargazos llegan a las costas del Caribe con las corrientes alteradas por el cambio de temperatura y de clima.
La inundación de estas platas platea graves problemas a los ecosistemas locales, así como a los pescadores.
A todo esto se suma la presencia de una gran cantidad de desperdicios sólidos que afean y hacen ver la playa Casita Blanca como un vertedero.
El problema requiere que las autoridades de Barahona trabajen en conjunto para sanear esta zona que ofrece una de las mejores vistas del litoral de playas y montañas que rodean el municipio de Barahona.
Reacciones
Estas algas solo están presentes en la ensenada de la playa Casita Blanca, donde el oleaje es ligero”.
Rafael Matos
Ecologista
Ninguna autoridad interviene para resolver el problema. El hedor es insoportable”.
Manuel Segura
Residente