Santiago. La alcaldía de este municipio otorgó un plazo de cinco días a los vendedores improvisados para que regularicen sus casetas.Para su aprobación, los propietarios de casetas o carritos deberán cumplir con una serie de requisitos, entre los que figura el perfecto estado de los mismos y tener certificación de cursos de manejo de alimentos. Según las declaraciones del relacionista público de la alcaldía de Santiago, vencido el plazo serán retirados de las calles todos los puntos comerciales informales que no se rijan por las disposiciones.
Grey Núñez explicó que estas regulaciones buscan que las operaciones de los vendedores sean correctas y que los negocios que distribuyan comida tengan la debida higiene sanitaria para evitar la propagación de enfermedades. La alcaldía busca regular el funcionamiento de estas casetas que habían sido retiradas por no cumplir regulaciones.