Como si se estuviera cumpliendo la profecía bíblica de que “Ya no hay padres para hijos, ni hijos para padres”, se podrían calificar los casos de violencia de varios hombres hacia sus vástagos, que se han registrado en los últimos días en la República Dominicana y que han conmocionado a la sociedad.Ahorcar a sus hijos y luego suicidarse, intentar matarlos, agresiones sexuales e intento de violaciones, son solo algunos de los hechos que se han difundido en los medios de comunicación en los últimos días que demuestran lo “enferma y perturbada” que está la sociedad dominicana, de acuerdo con el psiquiatra Secundino Palacios.
El caso más reciente ocurrió este miércoles en el sector Los Jardines del Ozama, en Santo Domingo Este, donde un hombre intentó matar a sus dos hijas de 11 y 16 años, dándoles a ingerir un veneno en un jugo, por los alegados problemas pasionales que mantiene con la madre de ellas.
Narciso Núñez descargó la ira que sentía contra su expareja Edith Medina Valenzuela, de 36 años, sobre las niñas. El hombre primero intentó ahorcarlas, luego les suministró el veneno y finalmente incendió la vivienda donde se encontraban. Ambas se encuentran en condición estable.
De igual modo, un hombre intentó violar a su hija alegando que la había mantenido toda su vida sin obtener ningún beneficio. Al hombre, cuyo nombre no fue suministrado, le impusieron tres meses de prisión preventiva.
En tanto que en el sector Los Barracones, del barrio Las Enfermeras, en Los Mina, en Santo Domingo Este, el 14 de este mes Anderson Hernández, de 40 años, ahorcó a sus hijos Anderson Monegro, de 4, y a Andry Monegro, de 3, y luego se suicidó, alegando igualmente problemas pasionales con su pareja, además de las deudas que le agobiaban. También en Los Mina, un hombre de 39 años estranguló el 18 de este mes a su hija de 12.
Para el psiquiatra Secundino Palacios estos casos podrían estar vinculados a problemas graves de depresión y familiares, sumados a precariedades económicas, de falta de empleo, entre otros, que agobian a la sociedad dominicana.
“Unido a lo que son los llamados estresores psicosociales, que son el puñado de desgracias que atrapan a los seres humanos desde que se levantan hasta que se acuestan. Problemas de toda índole a los que pueden darles respuestas”, sostiene Palacios.
Señala que factores como la pobreza, la exclusión social y la desesperanza son factores que actúan como inductores hacia el crimen, el suicidio, el homicidio.
El experto mostró preocupación por la situación y considera que la misma crece en el país y se ha convertido en una epidemia. “La salud mental implica tener algo que hacer, algo que dar , algo que esperar, cuando esas expectativas se truncan, cuando el ser humano no espera nada bueno, la vida se le vuelve azarosa, traumática, tórpida, es un escarnio estar vivo”, sostiene.
Consideró como una pandemia la cantidad de niños que son maltratados por sus padres en el país. “Mientras más frustrado, marginado, pobres, sin posibilidades de satisfacer necesidades básicas, más violentos y agresivos se vuelven y dónde descargan esas frustraciones, es en sus hijos y en sus mujeres, pero la tendencia es a crecer, porque ninguno de estos problemas sociales se están enfrentando en sus raíces”, plantea.
El psiquiatra atribuye el hecho de que ahora algunos hombres estén descargando la ira que tienen contra su pareja o expareja sobre sus hijos, a que ya las mujeres conocen algunos mecanismos que le pueden servir para defenderse y los menores son más indefensos.
“Porque ese es el eslabón más débil, al enfrentar a una mujer puede haber niveles de resistencia, la mujer utiliza mecanismos de defensa, se defiende más, ya que la mujer tiene un poquito más de conciencia, de mecanismo de protección, ya sabe que hay una fiscalía por ahí donde ir, en algunos cuarteles le ponen un poquito de atención, no mucho. Entonces, el eslabón más débil al interior del hogar son los hijos”, explica.
Sostuvo que hay veces que en los medios se destacan más los feminicidios y en otro momento se difunden más los casos de violencia hacia niños, pero afirma que “esos dos casos andan caminando de la mano, casi juntos”.
“Algunas veces sacan uno más que otro en los medios, pero en el diario vivir el maltrato infantil sigue siendo un dolor de cabeza en la República Dominicana”, insiste.
Palacios recomienda buscar ayuda profesional
Para evitar que los casos de violencia se sigan registrando, Palacios recomienda a las personas con problemas de este tipo buscar ayuda profesional cuando sientan que no pueden solucionarlos. No obstante, reconoció que los tratamientos psicológicos son muy costosos. Palacios critica que en el país no haya políticas dirigidas a la formación de un ciudadano solidario y más identificado con la problemática del prójimo. “Políticas globales, dirigidas a ver qué es lo que queremos lograr con los jóvenes, con los hogares, con las familias, que tipo de ser humano es que queremos construir, porque los seres humanos se construyen en el hogar, en las escuelas y en la sociedad”, manifiesta.