Santiago. Debido a las constantes descargas que se han hecho al embalse de Tavera-Bao por las lluvias, los sistemas de acueductos de Santiago operan con un déficit en su capacidad de potabilización de un 30 por ciento, ocasionando la suspensión del servicio en sectores de la parte urbana.La información fue ofrecida por Héctor Jáquez, gerente de Operaciones de la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Santiago, quien dijo que de los seis sistemas de acueductos que tiene Santiago, tres han estado saliendo constantemente de servicio dejando sin agua al centro de la ciudad y la parte suroeste hasta por dos días.
“Cada vez que se desfoga la presa nosotros nos vemos obligados a sacar de servicio esos sistemas porque no tenemos la capacidad para potabilizar esa cantidad de líquido”, adujo. El gerente de operaciones de Coraasan añadió que a eso se suman los altos niveles de suciedad que en los últimos días ha presentado el agua por la sedimentación con que sale de Tavera.
No obstante, el funcionario dijo que a medida que han cesado las precipitaciones y la presa se ha dejado de desfogar los sistemas de acueductos de Nibaje y La Noriega están retornando a la normalidad, pero admitió que sigue la turbidez y la producción sigue limitada.
En ese sentido, dijo que los técnicos de Coraasan trabajan de manera apresurada y permanente en la normalización de los sistemas de potabilización para devolverle la calidad al agua que en los últimos días ha estado llegando turbia y con mal olor a los usuarios y que ha generado quejas de los afectados. Antes de las lluvias, las quejas se daban por los niveles bajos de la presa de Tavera.
Al referirse a la suspensión del servicio de agua en el municipio de Villa González, Héctor Jáquez informó que la planta que suple a esa demarcación quedó prácticamente anulada por las fuertes crecidas del canal Ulises Francisco Espaillat, de donde se nutre la misma. En sectores de la zona sur y la parte baja de Santiago han aumentado las denuncias por la falta de agua.