Luis Abinader se perfila como el candidato presidencial natural del Partido Revolucionario Moderno (PRM) de cara a las elecciones del 2020, luego de su desempeño en las pasadas elecciones donde logró el 35% de la votación y el papel que ha seguido desempeñando en la oposición luego de las votaciones.
Sin embargo, con el camino que han ido tomado las cosas en el PRM, Abinader, de 49 años, tiene en su trayectoria la amenaza del expresidente Hipólito Mejía, de 75 años, que podría disputarle la candidatura del PRM, un competidor difícil de vencer y un caballo de batalla al que hay que ganarle en el campo de guerra. La primera batalla entre los sectores de Mejía y Abinader será el próximo año cuando el PRM tendrá que hacer una convención para la renovación de sus autoridades que por mandato estatutario tendría que efectuarse a partir de septiembre del 2017.
Hasta ahora, en el PRM se ha impuesto la visión de Abinader en lo que respecta a la integración de los órganos electorales que sean personas independientes y su conformación no responda a un criterio de reparto entre las élites de los partidos políticos. Ese enfoque de Abinader dista del manejo en oposición que han tenido Mejía y Miguel Vargas en su momento.
Ambos dirigentes, desde el PRD, optaron por incluir dirigentes de la organización en el órgano electoral y las altas cortes, por ejemplo, Eddy Olivares, miembro de la Junta Central Electoral, es cercano colaborador de Mejía, y Marino Mendoza, juez del Tribunal Superior Electoral (TSE), es allegado de Miguel Vargas, por solo citar dos ejemplos.
En esta etapa, Abinader ha sido el dirigente que ha dado la cara en el PRM para hacer oposición al Gobierno y exigir independencia en la selección de los miembros de los órganos electorales, contrario a Mejía que no ha emitido declaraciones públicas para defender la decisión de su partido sobre los temas que se debaten en el diálogo político.
Abinader tendrá que cuidar cada paso, para evitar repetir la historia de Vargas en el PRD, que luego de que fue candidato presidencial del partido blanco en el 2008, su posicionamiento lo colocó como el candidato lógico de la organización para las elecciones del 2012, pero Mejía lo sorprendió en la convención y le ganó con más del 53%. De hecho, ese acontecimiento originó el cisma en el PRD y que dio lugar al nacimiento del PRM.
El excandidato presidencial ya derrotó a Mejía en la convención del PRM para la candidatura presidencial de las elecciones que tuvieron lugar el pasado 15 de mayo, pero el propio Mejía había expresado que si Medina se presentaba como candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) no optaría por la candidatura presidencial. Para el proceso, la hija de Mejía, Carolina, fue la compañera de boleta de Abinader y ahora es vista como la heredera política de su padre por lo que si el expresidente opta por no buscar de nuevo la candidatura presidencial, es posible que impulse a su hija.
Fortaleza en las estructuras
Abinader cuenta con un recurso imprescindible en política, tiene estructura interna y la mayoría de los integrantes de los puestos de dirección en la organización están vinculados a él. De hecho, la Alianza Social Dominicana (ASD), un partido de la familia Abinader, fue la estructura legal que usaron los dirigentes que salieron del PRD para fundar al PRM.
Abinader tiene una trayectoria política de más de 16 años y en ese proceso ha sido candidato vicepresidencial en el 2012 y presidencial este año.
La gran preocupación de Abinader es inseguridad
En la pasada campaña electoral, Abinader asumió el tema de la inseguridad ciudadana como su principal propuesta en caso de ganar la presidencia de la República. Su propuesta consiste en aumentar a RD$22 mil el sueldo de los agentes de la Policía Nacional y hacer una profilaxis a lo interior del cuerpo policial. Esta semana criticó que en el presupuesto general para el próximo año no se haya incluido una mayor cantidad de dinero para la seguridad y un aumento de salario para los agentes del orden público.
Está dedicado a tiempo completo a la política
Abinader es un empresario y economista de profesión, pero desde la pasada campaña está dedicado a tiempo completo a la actividad política. De hecho, asiste todos los lunes, cuando está en el país, a la reunión de la Comisión Ejecutiva del PRM que se reúne semanalmente para fijar posición sobre los temas de interés nacional y de debate público. La Comisión Ejecutiva es un órgano del PRM de 50 miembros, en el que Abinader tiene la mayoría de integrantes, frente a Mejía y otros que se manejan como independientes.