(Dennis Thompson – HealthDay News) – Las células grasas “delgadas” en realidad podrían hacer que sea más difícil perder peso y más fácil aumentar los kilos de más, señala un estudio reciente. Los investigadores dicen que es posible predecir si alguien va a aumentar de peso basándose únicamente en el tamaño de sus células grasas.
Las personas con células grasas grandes tienden a perder peso con el tiempo, y las que tienen células grasas pequeñas tienden a aumentar de peso, según un estudio sueco que se presentará en el Congreso Europeo sobre Obesidad en Venecia, Italia. Concluye el miércoles. ”Nuestros resultados sugieren que la pérdida de células grasas grandes tiene un mayor impacto en el peso que la pérdida de las pequeñas”, señaló el investigador Peter Arner, profesor emérito de medicina del Instituto Karolinska, en Estocolmo.
“Es un poco como tener una habitación llena hasta arriba de unos pocos globos grandes o muchos pequeños”, dijo en un comunicado de prensa. “Es más fácil hacer espacio vacío en la habitación, dejando salir el aire de los globos grandes en lugar de los pequeños”. Por otro lado, agregó, “es más fácil llenar la habitación si muchos globos pequeños aumentan un poco su volumen, en comparación con tener pocos globos grandes y llenarlos solo un poco”.
En el estudio, los investigadores midieron el volumen de células grasas en la grasa abdominal de 260 personas con una edad promedio de 44 años y un IMC promedio de 32, que se considera obeso (el IMC es la abreviatura de índice de masa corporal, una medida de la grasa corporal basada en la altura y el peso).
Un promedio de 15 años después, los mismos participantes fueron vistos de nuevo. Los investigadores midieron su peso, IMC y grasa corporal total. Tener un número alto de células grasas grandes se asoció con reducciones en el peso, el IMC y la grasa corporal total, informan los investigadores. Por otro lado, muchas células grasas pequeñas se asociaron con aumentos en las tres medidas.
El efecto siguió siendo significativo, incluso cuando se tomaron en cuenta otros factores, como la edad, el sexo y el nivel de actividad física, dijeron los investigadores. Medir las células grasas de una persona en una etapa temprana de la vida podría ser muy importante para su salud posterior, dándoles una idea de a qué se enfrentan cuando se trata de mantener un peso saludable, concluyeron los investigadores.
“Podría ser de gran valor clínico tener información sobre el tamaño de las células grasas antes de comenzar un programa de control de peso”, dijo Arner. “Si se da el caso de que a las personas con células grasas grandes les resulta más fácil perder peso, a las que tienen células más pequeñas se les podría dar un apoyo adicional”.
“Desafortunadamente, no hay una manera fácil de medir el tamaño de las células grasas en la actualidad, pero es algo en lo que estamos trabajando y estamos cerca de encontrar una solución”, agregó. Sin embargo, las personas con muchas células grasas pequeñas no deberían sentirse deprimidas, dijo Arner. Esas células proporcionan otros beneficios.
“Es bien sabido que las personas con células grasas pequeñas tienen un mejor perfil metabólico que las personas que tienen el mismo peso pero tienen células grasas grandes”, dijo Arner. ”Esto significa que si alguien con células grasas pequeñas aumenta de peso, quizá no aumente su riesgo de afecciones como la diabetes tipo 2 y la hipertensión, tanto como si tuviera células grasas grandes”, concluyó.
Debido a que estos hallazgos se publicaron en una reunión médica, deben considerarse preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por profesionales.