Santiago. Familias que quedaron aisladas por los derrumbes que se registraron en el sector Yagüita del Pastor, en Bella Vista, dijeron que han sido ignoradas por las autoridades y amenazan con iniciar un plan de lucha que incluirá protestas.
En el lugar también colapsaron varias viviendas y otras fueron deshabitadas porque están a punto de desplomarse.
Las familias que tienen vehículos deben dejarlos en las calles aledañas, a cientos de metros de distancia de sus hogares, ya que la vía colapsó. Mientras los dueños de colmados y otros negocios deben pagar para que les transporten la mercancía a pies.
Dijeron que a pesar del tiempo que llevan reclamando auxilio, las autoridades se han mantenido indiferentes, por lo que realizan reuniones y consultas para definir métodos de lucha que han de implementar para llamar la atención.
Reclamo
Julio Rosario, miembro de la junta de vecinos de la comunidad, dijo que la vía se ha estrechado por los derrumbes, al punto que desde hace varios meses no lleva el carro hasta su casa, ya que por el lugar solo puede atravesar un motor y con mucha precaución para no caer al vacío. “Vivimos en una situación de riego, porque si por casualidad, Dios no lo quiera, se produce un incendio, los camiones de bomberos no podrían auxiliar a nadie, y este lugar desaparecería”, dijo.
Los comunitarios quieren que se busque una salida a la situación y que se haga una nueva calle por la que puedan llegar hasta sus hogares sin riesgos.
Además, pidieron que les construyan casas quienes la perdieron o están en riesgo de perderlas.
Los moradores dijeron que en el lugar no se ha puesto ninguna protección para evitar que niños o ancianos puedan caer por el vacío o sufran algún accidente.
Dicen autoridades han sido indiferentes
Las familias afectadas por los delizamientos de tierra dijeron que solo el senador Julio César Valentín fue a la zona, pero a pesar de conocer su realidad y asumir compromisos con la comunidad, nada ha hecho para buscar una alternativa, mientras la situación se agrava con el paso de los días y crece la incertidumbre entre los que han quedado sin hogar y en reisgo.
