Miguel Mejía pronuncia Declaración por la Soberanía de la Patria durante asamblea
Miguel Mejía pronuncia Declaración por la Soberanía de la Patria durante asamblea
ESCUCHA ESTA NOTICIA

Santo Domingo. – El Movimiento Izquierda Unida (MIU) encabezado por Miguel Mejía, secretario general, celebró este domingo su VII Asamblea Nacional de Dirigentes “por el rescate de la soberanía nacional”, en la que aprobó una declaración por la soberanía de la patria.

Al pronunciarse durante el acto realizado en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, Mejía se refirió al 181 aniversario de la independencia, próximo a celebrarse este jueves 27 de febrero.

Declaración Integra

Dentro de cuatro días el pueblo dominicano celebrará el 181 aniversario del momento sublime en que un puñado de patriotas declaró su independencia de Haití. Desde entonces, el camino de la libertad, la independencia y la soberanía ha sido andado por un pueblo que prefiere mil veces morir a ser esclavo. Esos altos ideales han sostenido a los dominicanos en épocas difíciles y alumbran nuestro presente y porvenir.

Nuestra historia es rica en heroísmos, sacrificios y combates. Jamás hemos transigido, ni transigiremos con quienes, dentro o fuera del país, sean capaces de conspirar contra la soberanía de nuestra Patria. Somos orgullosamente dominicanos y lo seguiremos siendo.

Los tiempos en que vivimos, no obstante, están llenos de incertidumbres y peligros.

La vieja amenaza de la injerencia, las intervenciones militares y la supeditación a potencias extranjeras cobran un nuevo ímpetu. Se declaran obsoletos y vulnerables principios sagrados, como el de la soberanía, que laceran a la Patria sagrada y ponen en riesgo nuestra existencia independiente como nación.

¿Qué está pasando?

Está en marcha una disputa por la hegemonía global, para lo cual se construyen bloques geopolíticos transnacionales. Estados Unidos, Rusia, China y la Unión Europea se encuentran inmersos en una confrontación, a veces silenciosa, donde se decide la emergencia de un nuevo orden internacional en sustitución del mundo decadente unipolar que hemos tenido hasta el presente.

Lo viejo se niega a desparecer mientras lo nuevo aún no ha nacido. Aunque cabe destacar la contribución que están haciendo Rusia y China, desde sus distintas realidades, en la construcción de ese nuevo orden internacional.

Se lucha globalmente por el control de las nuevas tecnologías, incluyendo la inteligencia artificial. También por las materias primas, especialmente por las tierras raras y el litio, decisivas en la producción de estas, y en última instancia, por la energía, el agua, el petróleo, el gas, la biodiversidad, el cosmos y el genoma humano. Se intenta controlar las comunicaciones, las redes sociales e INTERNET, como mismo se lucha por hacerlo con las rutas comerciales y los mercados, de lo cual es evidencia el renovado interés norteamericano por controlar el canal de Panamá.

En esta dura realidad también se incluye la puja por el control monetario y financiero mundial, las criptomonedas y la hegemonía militar, de lo cual son testimonio las guerras en Ucrania, Gaza, Siria y el Líbano.

Está emergiendo un mundo multipolar, donde el poder se concentrará en menos actores geopolíticos, pero económicamente mucho más poderosos, emergiendo realidades antes inimaginables, como los BRICS que desafían la tradicional hegemonía del dólar. Está emergiendo una nueva oligarquía transnacional, que tiende a destruir la soberanía de las naciones; que declara obsoletos conceptos claves como el Estado, la identidad cultural y la historia.

¿Cómo esto nos afecta?

En el caso dominicano, se han hecho públicas las noticias de que instituciones extranjeras, como el Cuerpo de Ingenieros del ejército norteamericano, explora nuestras riquezas minerales, sin aprobación del Congreso; los planes de que funcionarios norteamericanos de aduanas y control fronterizo sean los que dirijan la lucha contra las migraciones ilegales y el narcotráfico; se nos ordena con quién comerciar y cómo; qué exportar o importar y en qué proporción, todo lo cual es en cumplimiento del viejo plan neoliberal de reducir al Estado para poder soltar las manos de las transnacionales multimillonarias.

El irrespeto al Derecho Internacional ha sobrepasado los límites de la prudencia y la legalidad; nuestro país ha sido escenario de hechos inverosímiles, al extremo de que la investidura de un Secretario de Estado norteamericano, en visita oficial, se traslada al hangar de un aeropuerto a poner pegatina a un avión de otro Estado.

¿Cómo este poder imperial procura inducir a República Dominicana a una Cumbre Iberoamericana excluyente? Calificando como anti humanos a países que han sido más generosos y respetuosos con el pueblo dominicano, en clara alusión a Cuba, Nicaragua y Venezuela; con ello lo que se aspira es imponer a la nación dominicana a repetir la excluyente Cumbre de Las Américas convocada por Estados Unidos en junio de 2022.

Y, lo más grave, como este poder imperial incide en la escogencia del Ministerio Público, en abierta compensación a la docilidad.

En el caso de otras naciones del planeta, se habla sin rubor de planes para anexar Groenlandia y Canadá a los Estados Unidos; de imponer aranceles prohibitivos a las exportaciones hacia ese país; de reocupar el canal de Panamá, violando lo estipulado en los Tratados Torrijos-Carter; de hacer una limpieza étnica en Gaza para ayudar a Israel en su represión contra el pueblo palestino, desplazando a más de dos millones de  personas de sus tierras ancestrales, que de paso, permitiría explotar enormes reservas de gas y petróleo, mientras se cambian, a capricho, los nombres geográficos comúnmente aceptados, por decretos imperiales, como acaba de suceder con el Golfo de México. También se suman nuevas bases militares norteamericanas a las 800 ya existentes en todo el planeta; se inicia una alocada carrera espacial para ocupar los demás planetas del Sistema Solar: seincentiva la producción de robots para desplazar de sus labores tradicionales a los seres humanos y se experimenta con plagas y vacunas, de lo cual es muestra la pandemia de COVID-19. que azotó a la humanidad.

¿Qué podemos hacer?

Vivimos un momento de peligro mundial, especialmente para los países de América Latina y el Caribe, a los que Estados Unidos considera su traspatio seguro. Crecen las amenazas a nuestra independencia, soberanía y dignidad, incluyendo nuestra seguridad nacional y estabilidad económica. Está afectada nuestra capacidad de avanzar, prosperar y ser libres. Se hace necesario proteger nuestras industrias nacionales, el empleo de nuestros ciudadanos, el futuro de las nuevas generaciones.

Se impone forjar la más amplia unidad, por el rescate de la soberanía nacional. Proponemos un frente nacional que se conforme no solo sobre bases ideológicas y donde puedan estar y luchar por sus intereses empresarios, obreros, religiosos, intelectuales, luchadores sociales, líderes comunitarios y políticos.

Por la unidad en la diversidad, enfrentemos los retos de estos tiempos duros. ¡Salvemos el futuro de nuestra Patria!

Dada en la VII Asamblea Nacional de Dirigentes del Movimiento Izquierda Unida, en Santo Domingo, Capital de la República Dominicana, a los veintitrés (23) días del mes de febrero del año dos mil veinticinco (2025).

Posted in PaísEtiquetas

Más de panorama

Más leídas de panorama

Las Más leídas