El director general de migración, vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester, planteó que la trata y el tráfico de personas están estrechamente vinculados a la migración irregular y al crimen organizado transnacional.
El alto militar y funcionario expuso, en ese contexto, que la República Dominicana está también identificada como un país destino para mujeres víctimas de trata con fines de explotación sexual.
Agregó, asimismo, que desde aquí existen rutas migratorias de personas en esa condición, particularmente hacia países de Europa, Centro, Suramérica y el Caribe, principalmente España, Bélgica, Holanda, Suiza, Panamá, Brasil, Haití y Argentina entre otros.
El titular de la DGM expuso sus criterios en el Primer simposio internacional sobre las amenazas, preocupaciones y otros desafíos que afectan la seguridad pública en la región, organizado por la Policía Nacional y celebrado aquí el viernes y sábado recién pasados.
Lee Ballester, desde ese escenario, abogó por el fortalecimiento de la cooperación internacional con el propósito de desmantelar las redes transnacionales involucradas e hizo un llamado para que se despliegue una mayor acción y compromisos de parte de los Estados, Organismos Internacionales y de la sociedad para erradicar estas prácticas ilícitas.
Señaló que un control migratorio efectivo reduce la posibilidad del delito de trata y tráfico de personas y otras amenazas, y resaltó los esfuerzos que se realizan en el país para afrontar esos males. Afirmó que la DGM, el año pasado y en los primeros dos meses de éste, sólo de nacionalidad haitiana ha deportado más de 310,685 personas en condición migratoria irregular y que, igualmente, la institución que dirige en los últimos cinco meses ha imputado y sometido a la justicia a 88 personas, en 71 casos que han reportado más de 400 víctimas, la mayoría extranjeros.
Dijo que la DGM trabaja junto a organismos especializados, eEntre esas acciones están el intercambio de información con la Policía Internacional (Interpol), Procuraduría General de la República, Policía Nacional, Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y otras agencias de naciones aliadas para combatir redes transnacionales de trata y tráfico de personas.