Llegaron el tractor y préstamos del Bagrícola y la reparación y construcción de los canales marchan a todo vapor
El Granado.- Cuando el presidente de la República, Danilo Medina Sánchez, pisó tierra en la pequeña comunidad de El Granado en el municipio de Tamayo, la gente no lo podía creer. Fue que esa visita pasó de ser sorpresiva a increíble. Medina no sólo “le cayó como del cielo”, sino que llegó con otro presidente, el de Panamá, Juan Carlos Valera. Fue como una especie del 2×1 que dejó a todos boquiabiertos.
Sucedió el 19 de noviembre del 2015 y los incrédulos y opositores a su gobierno oían aquel discurso como tema de campaña. Ahora quieren dirigir el barco, “pues este gobierno es de todos los dominicanos”.
Sabiendo ya que el problema de esa zona era el agua para irrigar los predios, Medina dijo que electrificaría el sistema de bombeo, cuyos desvencijados motores diésel habían colapsado, muriendo todas las cosechas. Martilló con la rehabilitación de todos los canales de riego y la construcción de otros hechos a base de pico y pala perdiéndose más del 50% de las escasas aguas que por allí circulaban. Y para cerrar con broche de oro garantizó que las tierras serían preparadas con un tractor que donaría para El Granado y Guanarate y la tramitación de préstamos con el Banco Agrícola para que nadie se quede sin sembrar.
Los presentes que abarrotaron el pequeño centro comunal de El Granado y que venían además de las comunidades de Cabeza de Toro y El Granado no salían del asombro.
Las mujeres que fueron al encuentro pensando en un pequeño proyecto de criar chivos y ovejos, hicieron su solicitud, pero Medina estimaba eso como muy simple y les dijo: “tendrán una fábrica de ropas escolares y van a suplir a toda la zona de los uniformes que necesitan los niños para educarse”. En lo adelante correspondería al Instituto Nacional de la Aguja (Inaguja) impartir cursos de costura, luego de que reciban las máquinas.
De pie la gente aplaudió para luego abrazar al mandatario. El presidente Valera observaba emocionado esta experiencia y dijo que el modelo será estrenado en Panamá.
Ha transcurrido un año y nueve meses y lo que está pasando en El Granado y la zona es una revolución. Llegó el tractor, llegaron los préstamos del Banco Agrícola, el edificio donde se fabricarán los uniformes está avanzado en más de un 90%, la reparación y construcción de los canales marchan a todo vapor y la obra cumbre, la electrificación del sistema de bombeo funciona a toda capacidad, extrayendo agua del subsuelo para toda la comarca.
“Esto es un sueño del que jamás despertaremos”, confiesa el agricultor Rafael Mesa Mora, que ha visto cumplir cada una de las ofertas del mandatario.
En realidad ha sido una conjugación de factores que ayuda a esta comunidad a escribir su antes y después. Primero la visita histórica de Medina y el presidente Valera, el empeño del ministro José Ramón Peralta, la entrega del director del Instituto Agrario Dominicano (IAD), Emilio Olivo y la puntualidad del contratista José López que prácticamente se ha mudado a este pueblito para dirigir personalmente los trabajos en los canales de riego.
Esperanzas
Para este año ya la gente hace planes para la cosecha de cebolla que arranca en octubre y el Banco Agrícola y su director Carlos Segura Foster se preparan para el financiamiento. Otros rubros como ajíes, plátanos, berenjena, maíz y cilantro, serán sembrados sin dificultades.
Las mujeres solo esperan que le terminen su fábrica de uniformes. Todo el pueblito y otras comunidades se mueven alrededor de estos proyectos que han generado decenas de empleos, lo que ha dinamizado el pequeño comercio, ha mejorado la calidad de vida y ha abonado sus esperanzas.