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Santo Domingo.- Con una sonrisa genuina y unos ojos llenos de esperanza, Maritza, una mujer que lleva catorce años postrada en una silla de ruedas, su único anhelo es la reconstrucción de su humilde vivienda.
En un panorama desconsolador, con la mayoría de las maderas rota y zinc al colapso vive la señora Maria Ascencio Romero de 51 años, conocida cariñosamente como Maritza.
La señora reside en Hato Nuevo. Debido a una preeclampsia, quedó en una silla de ruedas, perdiendo la movilidad de sus piernas.
La inseguridad en su entorno solo ha empeorado sus noches, llenándola de ansiedad.
Las numerosas grietas de la vivienda hacen que, en tiempos de lluvia, la casa se moje.
A pesar de las dificultades, y las enfermedades que posee, la ilusión en sus ojos sigue intacta.
Ascencio solicita la ayuda del Plan Social o de una mano generosa que puedan repararle su vivienda, además de costear sus medicamentos.
Si alquien desea colaborar a la causa de la señora Maritza puede contactarla al teléfono (849)886-5083