Los “dimes y diretes” entre los ffiscales y jueces se dan tras fallos contrarios de tribunales a peticiones de fiscales
Las recientes variaciones de medida de coerción a los imputados en los casos de corrupción aumentaron las diferencias que se han observado en los últimos meses entre los fiscales y los jueces.
A esto se suma la percepción que tiene el movimiento cívico Participación Ciudadana de que durante este año se ha observado que “los tribunales dominicanos no están a la altura del reclamo nacional de avanzar en la lucha contra la corrupción”.
Las decisiones de los tribunales de cambiar la prisión preventiva a arresto domiciliario a los acusados de actos de corrupción, han hecho que más de uno de los actores del sistema judicial hable sobre el rol de los demás y le diga cómo debe actuar.
Una de las declaraciones más recientes sobre el tema la hizo la fiscal Yeni Berenice Reynoso, directora de Persecución del Ministerio Público, que dijo que al que favorezca por intereses a un corrupto no se le puede llamar honorable ni puede exigir respeto.
Y que “quizás puedan engañar a los demás, pero posiblemente no puedan engañarse a sí mismos al verse al espejo y saber que, con su decisión, están contribuyendo a un clima de impunidad que daña todo”.
“Quien favorezca por intereses a un corrupto que tenga el valor de verles la cara a sus hijos para tratar de justificar que está haciendo lo correcto, favoreciendo a un corrupto que ha desfalcado al Estado por miles de millones, mientras que a los pobres acusados por robos y delitos menores les niega lo mismo que le otorgan al acusado de crimen organizado, que le ha robado el derecho de tener un mejor futuro”, dijo.
Estas palabras las pronunció durante un reconocimiento que le hizo Participación Ciudadana tres días después de que una jueza dispusiera la libertad provisional de unos cabecillas del caso Coral.
“Si usted puede vivir y sentirse orgulloso de eso, es su derecho, pero por favor no nos pida que lo llamemos honorable y no nos exija un respeto que usted mismo no se tiene”, sostuvo en su discurso.
Reynoso dijo que mientras más acusados manden a sus casas a cumplir la medida de coerción recluidos allí “más horas de trabajo dedicaremos a cada uno de las docenas de procesos en curso”.
Ese día, en la misma actividad, el fiscal Wilson Camacho, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), aseguró que el cuidado y la cobardía suelen estar presentes al momento de juzgar casos de corrupción.
“Se suele temer castigar a miembros de espacios de poder que luego pueden decidir el futuro del juzgador. El operador del sistema de justicia tiene que aplicar la ley, aunque se la cobren luego”, expresó.
A su consideración, siempre hay una excusa para favorecer a los procesados por corrupción.
Los jueces reaccionan
Las asociaciones que agrupan a jueces han reaccionado a las críticas que han emitido los fiscales tras las decisiones de los tribunales. Sobre esto Reynoso piensa que “el que no quiera que lo cuestionen ni rendir cuentas no puede ser servidor público”.
Lo que han dicho los magistrados es que las declaraciones de los miembros del Ministerio Público son populistas que atentan contra el Estado de derecho, las reglas del debido proceso, el principio de separación de funciones y la independencia judicial.
“Resquebraja la institucionalidad e independencia de este poder del Estado, su autonomía y la majestad de la justicia, principios y valores que defenderemos siempre, máxime si los juzgadores han obrado en ocasión del poder que les ha sido delegado de dictar decisiones jurisdiccionales en nombre de la República”, dijo en un comunicado la jueza presidenta de la Asociación Jueces Dominicanos para la Democracia (Judemo), Elka Reyes Olivo.
Reyes Olivo ha emitido varios comunicados en defensa de los magistrados, que, al contrario de los fiscales, no hacen constantemente declaraciones a la prensa, pues “los jueces hablan por sentencia”.
Hace unos meses, el magistrado de la Suprema Corte Francisco Ortega, quien conoció la preliminar por los sobornos Odebrecht cuando el caso se encontraba en la jurisdicción privilegiada, indicó que en el sistema de justicia, el juez es un tercero imparcial que juzga “lo que le llevan”. Añadió que los jueces no pueden cargar con las falencias ajenas.
Las diferencias entre fiscales y jueces, que tiene funciones muy distintas (pues uno acusa y el otro juzga), podrían seguir agravándose a medida que avanzan las audiencias de los casos de corrupción.
Esto así, debido a que aún están en la etapa preliminar los casos de corrupción iniciados desde hace dos años.
La procuradora no habla; Poder Judicial responde
En estos “dimes y diretes”, que se han estado dando durante un tiempo, la procuradora general de la República, Miriam Germán, no se ha pronunciado públicamente.
Mientras que el presidente del Consejo del Poder Judicial, Luis Henry Molina, ha dicho, ante preguntas de la prensa, que el precio de la independencia judicial consiste en tomar decisiones que pueden no gustar porque están sustentadas en el Derecho y no en la popularidad.
“La independencia es una protección ante la posibilidad de presiones; la sociedad debe comprender que, ante el Poder Judicial, una parte acusa y tiene a su cargo destruir la presunción de inocencia por medios legales, y otra tiene que proteger su presunción de inocencia.
La verdad, si hay culpabilidad o no, lo establece una sentencia, que a su vez tiene mecanismos para su revisión que son las vías recursivas”, dijo Molina en una ocasión mientras participaba de una actividad.