Fueron dictados tres meses de prisión preventiva como medida de coerción contra el triple homicida del municipio de Bonao, en la provincia de Monseñor Nouel.
La desición fue dictada por la jueza Rosa María Almonte contra Carlos Campusano, quien es acusado de ultimar a tres personas, entre ellos a su expareja.
El agresor ultimó a su esposa, María Mordan García y a su presunta amante, María Juana Ortiz Portorreal, así como a Frank Lebrón, el guardia de seguridad asesinado al intentar detener al triple homicida.
Asimismo, hirió de bala en el hombre izquierdo a su hijo Víctor Alfonso García, de 34 años y al señor Wandy Tomas Bonifacio Ramírez, de 42, propietario de la residencia donde laboraba su esposa Mordan García (víctima).
“Él tenía otra mujer, la amante de él, entonces mi mamá se dio cuenta y todo el mundo se dio cuenta. Yo le dije a él que dejara a esa mujer y él no quería”, sostuvo su hijo Alfonso García.
Carlos Campusano, quien resulto herido por la policía, para poder neutralizarlo tras haber cometido los crímenes, algunos vecinos dicen estar sorprendidos por el hecho.
El hecho ocurrió en el sector Los Solares de Villa Liberación, municipio de Bonao, provincia Monseñor Nouel.
Violento
En ese sentido, Francisca Esmeralda García, hija del triple homicida de Bonao y de una de las víctimas, narró que su padre amenazaba con matarlos para que su madre regresara a la relación.
La versión de la hija coincide con la ofrecida por su hijo Víctor Alfonso García, también herido en el incidente, quien dijo que Carlos Campusano «quería estar con las dos», con su esposa y con su amante.
Ambos hijos describen al triple homicida de Bonao como violento en la casa y “alma de Dios” en la calle.