“Fiesta y mañana gallo”, dicen los dominicanos, mientras cantan y bailan por las primeras festividades decembrinas
Las fiestas decembrinas en la República Dominicana comienzan el 24 de diciembre con la cena de Nochebuena, este suele ser un momento de compartir entre familiares y amigos, y después de terminar algunos pasan al junte de las casas a las calles y extienden la rumba hasta el 25.
Luego de la gran comelona navideña, las calles de los diferentes sectores se abarrotan de personas que entre bailes, risas y consumo de alcohol ven el alba rayar en las diferentes avenidas de los barrios más populares.
Tras recorrer varios sectores de la capital dominicana durante la mañana avanzada del 25 diciembre cada año se torna más normal ver grupos de personas que extienden la rumba del 24.
Ejemplo de esto es el popular sector de Capotillo en la calle La Isabela, donde “la chercha” que empezó durante la tarde del 24, aún en horas tardías de la mañana del 25 continuaba como si apenas hubiera empezado.
El colmado Jiménez fue uno de los puntos de encuentro de decenas de jóvenes, los cuales aún con el expendio de bebidas cerrado continuaban con la música en los carros, mientras bailabano y bebían en esta calle por las fiestas de la época.
A una esquina del “Teteo” de Capotillo también está el colmado Yoca, Comer es Primero, donde Rosaura Arias aprovecha el trasnoche y el hambre que provoca el pasar toda la madrugada despiertos para vender sancocho a un precio de 300 pesos.
“Este es mi primer año y hay mucha gente que ha amanecido y otros que se están despertando ahora, así que espero en Dios que todo se me venda”, expresó la emprendedora.
Otro ejemplo de esto es el Ensanche Espaillat, donde en diferentes calles las personas compartían y bailaban aún después de que los centros de expendio de bebidas alcohólicas se encontraban cerrados, aseguró Lucía de la Rosa, residente del lugar.
La vecina del colmado Ana dijo: “La gente cuando se le terminó la bebida durante la madrugada vinieron y llamaron a la dueña del negocio para que abriera como a eso de las 5:00 de la mañana y desde entonces ese coro sigue ahí con su rumba” dijo.
De igual manera añadió que este año en comparación con el 2022 ha sido más tranquilo porque no se han armado disturbios, que durante las madrugadas en ocasiones se suelen dar cuando la gente amanece bebiendo.
Por su lado, el barrio Simón Bolívar dejó serias muestras de la rumba del 24 en la calle Jesús Galíndez, en el colmado Plaza CAL & Enrique las puestas del expendio de bebidas se ven totalmente abarrotadas de botellas.
Unos ríen y otros lloran
Aunque esta época es de gozo y alegría no todos ríen. Una escena de dolor se reflejó en el sector de Cristo Rey en el Distrito Nacional, en la funeraria San José, donde la familia del fenecido Diómedes Sánchez lloraba por la pérdida de su ser querido.
Con rostros compungidos, miradas desoladas y gemidos de desconsuelo lloran la partida del señor Sánchez, hecho que provocará que la época de Navidad no tenga el mismo sabor que años atrás.
Sin embargo, a pocas esquinas de donde se visualizaba el dolor de la familias Sánchez también se seguía encontrando la alegría de las fiestas navideñas, un grupo de jóvenes fumaba hookah, bailaba dembow, y consumía cerveza y ron, por la continuación de la rumba del 24 de diciembre.
Vertederos improvisados
Luego de las festividades navideñas en las distintas barriadas del Distrito Nacional no solo se visualizan las personas que continuaban con sus rumbas extendidas sino también un gran cúmulo de residuos sólidos.
Los sectores de Capotillo, Simón Bolívar, Ensanche Espaillat, Villa Consuelo, Cristo Rey, San Carlos, Simón Bolívar, Villa Juana y otros quedaron cundidos de basura.
Los habitantes de estas zonas demandaron una mejoría del servicio de la Alcaldía del Distrito Nacional. Solo en el parque Pedro Livio Cedeño se visualizó un equipo del cabildo reunidos para iniciar sus labores.
Emergencias de hospitales llenas
Las salas de emergencia de los hospitales Darío Contreras, Ney Arias Lora y Moscoso Puello se mantuvieron concurridas, con decenas de personas heridas en accidentes de tránsito y trifulcas. Según Julio Landrón, director del Ney Arias Lora, la mayoría de casos de accidentes que llegan al centro están relacionados con jóvenes en motocicletas. En las emergencias del hospital Dario Conteras y Moscoso Puello, los heridos erran llevados en vehículos privados por familiares y amigos, y otros en ambulancias.