El acusado de matar al ministro de Medio Ambiente Orlando Jorge Mera solicitó a un tribunal de alzada ordenar su salida de Najayo, donde cumple prisión preventiva desde junio.
Fausto Miguel Cruz de la Mota, confeso asesino del fenecido funcionario, presentó un recurso de apelación para que se le varíe la medida de coerción.
El recurso será conocido este miércoles por la Segunda Sala Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional.
El imputado se encuentra dentro de la sala de audiencias, esperando su turno, pues hay otras vistas antes que la suya.
En el mismo salón se encuentra el hijo de Jorge Mera, el diputado Orlando Jorge Villegas, quien acudió junto al abogado de la familia, que se constituyó en actor civil en este proceso.
A finales de noviembre, el Ministerio Público presentó ante la Sexto Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional la solicitud de apertura a juicio contra el imputado, acusado asesinato, tenencia y uso ilegal de armas.
Los fiscales solicitaron también al tribunal que Cruz de la Mota siga en prisión preventiva
Asimismo, pidieron el decomiso, entre otros objetos, de una pistola marca Taurus, calibre 380, una Mini Uzi, dos escopetas Maverick calibre 12 mm., una pistola marca Carandai, calibre 9mm, una Toyota Rush G, color negro, año 2019.
Del acuerdo al órgano acusador, Cruz de la Mota mató a balazos, y con un arma ilegal, al ministro de Medio Ambiente Orlando Jorge Mera el mediodía del lunes 6 de junio.
El imputado acudió al despacho del funcionario, ubicado en el edificio que aloja al Ministerio de Medio Ambiente.
Indican que luego huyó hacia la Iglesia Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, ubicada en la urbanización Real, en donde entregó la pistola a un cura católico a quien informó que había cometido un crimen, aunque sin identificar a la víctima.
El 11 de junio pasado, el juez Rigoberto Sena, de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, dictó 12 meses de prisión preventiva como medida de coerción en contra de Cruz de la Mota, la cual cumple en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres, en San Cristóbal.