En el cuartel general de la OTAN “cada vez más consideran” un cambio de poder en Ucrania porque el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, se ha convertido en un obstáculo para los planes del bloque militar, comunicó este lunes el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia.
Ante el hecho de que las fuerzas de Kiev “pronto serán incapaces de contener la creciente presión del Ejército ruso” y la incertidumbre sobre el futuro de la ayuda militar occidental por la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, “la cúpula de la OTAN considera necesario preservar a toda costa los restos de Ucrania como trampolín antirruso“, reza el comunicado.
Para ello, la Alianza Atlántica quiere ‘congelar’ el conflicto ucraniano, llevando a Kiev y Moscú a un diálogo sobre ‘el inicio de su solución’.
“En Washington y Bruselas coinciden en que el principal obstáculo para la realización de tal escenario es Zelenski, a quien entre bastidores occidentales se refieren como ‘material de desecho'”, señala el organismo ruso.
“A la OTAN le gustaría deshacerse del líder del régimen de Kiev, sería ideal si fuera como resultado de unas elecciones pseudodemocráticas” que podrían celebrarse a más tardar en otoño de este año, agrega.
Campaña de desacreditación
En el marco de este plan, la Alianza está preparando una operación a gran escala para desacreditar al líder del régimen de Kiev. Durante la campaña presidencial se prevé publicar materiales sobre la apropiación por parte de Zelenski, personalmente, y por su equipo “de más de 1.500 millones de dólares de los fondos destinados a la compra de municiones”.
“Además, se pretende destapar la trama de Zelenski y su entorno para retirar al extranjero la asignación monetaria de 130.000 militares ucranianos muertos, que en papeles siguen figurando como vivos y sirviendo en el frente”, añade la inteligencia rusa.
Asimismo, está previsto hacer pública la implicación de Zelenski en los múltiples casos de venta de grandes lotes de equipo militar occidental donado a Kiev a diversos grupos armados en África.
“Así que hasta en la OTAN entienden que el ‘expirado’ Zelenski tiene las horas contadas. Solo que da lástima que esta toma de conciencia se haya producido a costa de la vida de cientos de miles de ciudadanos ucranianos”, concluye.
