Washington. Un equipo de Estados Unidos viajó a Rusia para encontrarse con las autoridades de ese país para negociar la paz.
El equipo lo encabeza Steve Witkoff, el enviado especial de Donald Trump.
“Ojalá podamos conseguir un alto el fuego de Rusia. Y si lo conseguimos, creo que habríamos recorrido el 80 % del camino para lograr que termine este horrible baño de sangre”, afirmó el presidente Trump.
Ayer Walz, habló este miércoles por teléfono con su homólogo ruso, Serguéi Shoigú, horas antes de que ambos Gobiernos celebren una importante reunión en Moscú.
Witkoff tiene previsto que se reúna este jueves con autoridades rusas para presentar el mencionado plan de alto el fuego.
El propio Waltz estuvo el martes junto al el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, en Yeda, donde se reunió con una delegación ucraniana que aceptó la propuesta estadounidense de una tregua de 30 días en la guerra contra Rusia, que por el momento no se ha pronunciado sobre la propuesta de alto el fuego
Trump señaló que ahora depende de Rusia la entrada en vigor de una tregua en la guerra de Ucrania, un día después de que el Gobierno ucraniano aceptara un alto el fuego de 30 días.
“Ayer tuvimos un gran éxito. Tendremos un alto el fuego total cuando entre en vigor. Ahora depende de Rusia, pero tenemos una buena relación con ambas partes”, expresó en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca junto al primer ministro irlandés, Micheál Martin.
Al ser preguntado por la prensa, Trump dijo que podría imponer nuevas sanciones a Rusia, pero explicó que no quiere hacerlo.
“En términos financieros, podría hacer cosas que serían muy perjudiciales para Rusia. No quiero hacerlo porque quiero lograr la paz, quiero ver la paz”, declaró.
Trump insistió en que Ucrania ha sido la “parte más difícil” de la negociación y puso como ejemplo la discusión que tuvo a finales de febrero en la Casa Blanca con el mandatario ucraniano, Volodímir Zelenski, pero señaló que ahora este sí está comprometido con lograr la paz.
Ucrania aceptó el martes la propuesta estadounidense para una tregua de 30 días a cambio de que Estados Unidos restaurara el suministro de ayuda militar e información de inteligencia que había paralizado para presionar a Kiev a negociar el fin de la guerra.
Ambos países se comprometieron además a firmar el acuerdo para la explotación conjunta de recursos naturales, que se vio frustrada por la discusión entre Trump y Zelenski en el Despacho Oval.
Kiev espera reciprocidad de Moscú
Ucrania espera una respuesta del Kremlin a su voluntad declarada de aceptar la propuesta de EE.UU. de un alto el fuego inicial de 30 días que ponga fin a los combates y los ataques aéreos rusos, que el miércoles volvieron a cobrarse la vida de varios civiles en el país invadido.
En rueda de prensa, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, dijo este miércoles que la posibilidad de que la tregua que propone EE.UU. se haga efectiva depende “al 100 %” de Rusia, que demostrará con su respuesta si quiere “seguir matando” gente o quiere poner fin a la guerra que inició hace ya más de tres años.
En el caso de que el presidente ruso, Vladímir Putin, diga que no al alto el fuego, Zelenski explicó que espera “medidas contundentes” de EE.UU. contra Rusia que, a juicio del líder ucraniano, podrían ser más sanciones y el refuerzo de la capacidad militar de Ucrania.
Mientras desde Moscú, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, declinó adelantar en qué sentido se pronunciará Rusia sobre la propuesta de EE.UU. y pidió aguardar a que el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, informe directamente al Kremlin del plan de Washington.
“Suponemos que, como se dijo ayer en Yeda, el secretario de Estado Rubio y el asesor para Seguridad Nacional, (Mike) Waltz, nos informarán a través de diversos canales sobre los detalles de las negociaciones y sobre lo acordado”, dijo Peskov en su rueda de prensa telefónica diaria.
Por su parte, Rubio declaró que espera mantener contactos con Moscú este mismo miércoles e instó a la parte rusa a dar una respuesta positiva a la propuesta de alto el fuego.
El jefe de la diplomacia estadounidense señaló que “si Rusia dice que no, eso nos dirá mucho sobre cuáles son sus objetivos”. Rubio repitió que no habrá una solución bélica a este conflicto y que sólo el diálogo podrá llevar la paz a la región.
Siguen las hostilidades con ventaja rusa
Mientras, los combates continúan a lo largo de la línea del frente y los ataques aéreos rusos a larga distancia han provocado otros cinco fallecidos civiles en Ucrania. Cuatro sirios murieron en el puerto sureño de Odesa en un ataque ruso con misil que provocó daños en infraestructuras portuarias y en un barco de bandera de Barbados y una mujer perdió la vida en la ciudad de Krivi Rig (centro) debido a la caída de un dron ruso. En la región oriental de Donetsk del este de Ucrania el Ejército ruso tomó otras dos localidades, una de ellas situada a sólo 16 kilómetros del bastión ucraniano de Kramatorsk, uno de los centros urbanos de la región que aún no ha conseguido conquistar Rusia. También hubo actividad en la región rusa de Kursk, donde fuentes oficiales rusas hablan de la caída en manos del Ejército del Kremlin de casi toda la localidad de Sudzha, la más importante que conquistó Ucrania en la operación transfronteriza que comenzó a principios del pasado agosto. Zelenski ha dicho sobre la situación en Kursk que sus tropas siguen llevando a cabo allí su misión, que tiene ahora como principal objetivo evitar bajas en las propias filas. La necesidad de proteger la vida de sus soldados es subrayada habitualmente por el presidente ucraniano y sus subordinados antes de que sus tropas consumen la retirada de alguna localidad importante bajo asedio ruso.