Un total de 75 soldados guatemaltecos y 8 salvadoreños llegaron a Haití para unirse a la fuerza multinacional de apoyo a la seguridad.
Estos refuerzos llegaron a Puerto Príncipe a bordo de un avión militar estadounidense, en un momento crucial para el país, que enfrenta una creciente violencia por parte de las bandas armadas que dominan gran parte de la capital y otras zonas.
El objetivo de estos contingentes es apoyar a las autoridades haitianas en la lucha por restaurar el orden y la seguridad.
La delegación de soldados la recibieron en el aeropuerto internacional de Puerto Príncipe por funcionarios clave del gobierno haitiano, incluyendo al presidente del Consejo Presidencial de Transición (CPT), Leslie Voltaire, el primer ministro, Alix Didier Fils-Aime, y el embajador de Estados Unidos en Haití, Dennis Hankis.
Además, se espera la llegada de más contingentes internacionales en los próximos días. Estos soldados se unen a un esfuerzo internacional, respaldado por las fuerzas multinacionales, para frenar la creciente ola de violencia en Haití.
La llegada de los soldados guatemaltecos y salvadoreños ocurre en un contexto de emergencia, en el que Haití enfrenta una profunda crisis de seguridad debido al accionar de las bandas armadas.
La Policía Nacional de Haití y las fuerzas internacionales están desplegando múltiples estrategias para desmantelar estas bandas, que controlan alrededor del 80 % de Puerto Príncipe y tienen presencia en otras regiones del país. Los nuevos refuerzos se suman a los 400 policías kenianos que ya están trabajando en colaboración con las autoridades haitianas.
Son 11,000 desplazados
Según un informe reciente de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la violencia de las bandas armadas ha forzado a casi 11,000 personas a abandonar sus hogares en la capital haitiana.
Los ataques recientes en barrios como Poste Marchand han intensificado la crisis humanitaria, empujando a miles de familias a refugiarse en albergues improvisados, algunos de los cuales se han creado recientemente para hacer frente a la creciente cantidad de desplazados.
El presidente Voltaire, en un discurso realizado con motivo de la celebración de los 221 años de independencia de Haití, declaró una “guerra” contra las bandas armadas.
En sus palabras, las pandillas han declarado la guerra al pueblo haitiano, y el gobierno, junto con las fuerzas internacionales, está decidido a responder con fuerza. En 2024, más de 5,000 personas perdieron la vida debido a la violencia de las pandillas, y las autoridades están comprometidas en erradicar este fenómeno durante el 2025.
