CPT prevé para este 2025 la celebración del referéndum para la reformar la Constitución y organizar comicios
Puerto Príncipe- Haití cumplió ayer cuatro años sin un Gobierno electo en las urnas, en medio de una grave crisis, marcada por el deterioro de las condiciones humanitarias y de seguridad, y la inseguridad alimentaria, lo que sumerge a este país en una total incertidumbre sobre su futuro, pero con la promesa del actual Gobierno de transición de celebrar unas elecciones este 2025.
Hace justamente cuatro años que el Consejo Superior Judicial de Haití puso fin al mandato del presidente Jovenel Moïse, en medio de manifestaciones de la oposición para que dimitiera porque aseguraban que su administración ya había terminado mientras que el mandatario, asesinato cinco meses después, sostenía que su gestión concluía en 2022 en base a sus interpretaciones de la Constitución.
El 7 de febrero es la fecha en la que tradicionalmente tienen lugar las investiduras en Haití o los discursos del presidente de turno por un nuevo año de gestión, pero desde 2018 está marcada por violentas protestas de la oposición o por tensiones causadas por bandas armadas que aterrorizan a la población civil.
En esa ocasión, también está marcada por la total incertidumbre debido a las amenazas de las bandas, que obligan a las autoridades a movilizarse para hacerles frente.
Aunque oficialmente no es un día festivo, los centros escolares y universitarios, así como la administración pública y privada optan cerrar sus puertas por miedo a represalias.
Un año decisivo para Haití
El Consejo Presidencial de Transición (CPT), formado el año pasado, prevé para este 2025 la celebración del referéndum para la reformar la Constitución haitiana y la organización de elecciones generales para dotar al país, entre otras cosas, de presidente, senadores, diputados y alcaldes.
Las últimas elecciones celebradas en el país tuvieron lugar entre 2015 y 2016, durante un período de transición, que terminó con la elección de Moïse, quien asumió el cargo el 7 de febrero de 2017.
Actualmente, se realizan exámenes de contratación de los responsables de las oficinas electorales, mientras que los consejeros realizan visitas por todo el país y se ha enviado un calendario electoral a las autoridades estatales, pero el escepticismo persiste, ya que las condiciones de seguridad están lejos de cumplirse en la región de Puerto Príncipe, controlada en un 85 % por las bandas armados que matan, violan y roban con total impunidad.
Una situación de seguridad insostenible
A pesar del despliegue desde junio de 2024 de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad en Haití (MSS), liderada por Kenia, la situación continúa deteriorándose debido a que las bandas armadas siguen apoderándose cada vez de más territorios, mientras las masacres y los ataques armados se multiplican en las provincias y en la región de la capital.
Una situación que ha llevado a miles de personas a huir de sus hogares para ir a vivir en condiciones inhumanas en campos de desplazados sin servicios sociales básicos como agua, electricidad y atención sanitaria, mientras una considerable cantidad han abandonado el país en busca de un mejor bienestar en otros lugares, como Estados Unidos y México.
Desde hace algunas semanas, las autoridades judiciales multiplican las detenciones de policías, antiguos y actuales funcionarios del Estado que estarían en connivencia con bandas armadas.
Lograr la transición es el gran desafío de las autoridades actuales, que son producto de un acuerdo firmado entre los diferentes actores políticos en el poder a mediados del año pasado tras la dimisión del primer ministro Ariel Henry en medio de un estallido violento el 29 de febrero pasado, cuando se supo que éste último, que no fue elegido sino designado tras el asesinato de Moïse, planeaba posponer las elecciones hasta agosto de 2025, a pesar de que su mandato ya había expirado el 7 de febrero de 2024.
Seguridad
Doscientos policías de Kenia ya están en Puerto Príncipe para integrarse en la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS), liderada por ese país africano y con el objetivo de frenar la extrema violencia en Haití.
A su llegada al aeropuerto internacional Toussaint Louverture a bordo de un avión de Kenya Airways, los efectivos, entre ellos agentes del cuerpo de elite SWAT, fueron recibidos por el máximo responsable del Consejo Presidencial de Transición, Leslie Voltaire, y el primer ministro haitiano, Alix Didier-Fils Aimé, junto a representantes del cuerpo diplomático, el director de la Policía Nacional de Haití, Rameau Normil, y el jefe de la misión multinacional, Godfey Otunge.
Se trata del cuarto contingente de Kenia en unirse a la misión, con lo que ya son unos 900 los agentes de esa nacionalidad integrados en la misión, a los que se suman efectivos guatemaltecos, salvadoreños (70 de ellos llegaron este mismo martes), bahameños, jamaicanos y beliceños, superando ya en total los 1,100 miembros..
“El Gobierno de Kenia se había comprometido a desplegar 1,000 efectivos y, a esta fecha, está cerca de lograr ese objetivo. Es un avance significativo hacia la realización del mandato de la MSS”, dijo Otunge.
Violencia sexual contra los niños
Los grupos armados que están causando una de las peores crisis de seguridad y humanitarias en la historia de Haití son responsables de que la violencia sexual contra los niños se multiplicara por diez el año pasado, afirmó un representante de la agencia de Naciones Unidas para la protección de la infancia, UNICEF.
En el mismo periodo, el reclutamiento de menores aumentó en un 70 %, sostuvo el portavoz del organismo en Ginebra, James Elder.
“En estos momentos hasta la mitad de los miembros de los grupos armados son niños, algunos de tan solo ocho años. Muchos son llevados a la fuerza, otros son manipulados o empujados por la extrema pobreza”, explicó en una rueda de prensa.
Juramento
El 7 de febrero es la fecha en la que tradicionalmente tienen lugar las investiduras en Haití.