El pasado mes de octubre el equipo de investigación de la Fundación Economía y Desarrollo construyó un Índice de Desempeño Consolidado de los Presidentes Dominicanos desde 1966. El Índice es el resultado de sumar la puntuación de 18 variables ponderadas con pesos diferenciados. La puntuación fue previamente normalizada de manera que el mejor resultado recibió 10 puntos y el peor 0.
Joaquín Balaguer obtuvo 10 puntos en crecimiento anualizado promedio del PIB real, el cual alcanzó 6.1% en sus 22 años de gobierno, seguido por Danilo Medina con 9.7 puntos (6.0%) y Leonel Fernández con 9.4 puntos (5.8%). Danilo Medina recibió 10 puntos en inflación anualizada promedio (2.4%), seguido por Leonel Fernández con 8.4 puntos (5.7%) y Antonio Guzmán con 5.6 puntos (11.5%). Danilo Medina recibió 10 puntos en incremento anual promedio de los ocupados como % del incremento anual promedio de la población en edad de trabajar (> 15 años), con 134.8%, seguido por Leonel Fernández con 6.4 puntos (97.2%), y Joaquín Balaguer con 3.9 puntos (71.1%).
Danilo Medina obtuvo 10 puntos en variación anualizada del salario mínimo real, la cual registró un aumento de 4.8%, seguido por Leonel Fernández con 7.3 puntos (2.1%) y Joaquín Balaguer con 3.2 puntos (-2.0%). Danilo Medina recibió 10 puntos en reducción anualizada del índice de pobreza, el cual se redujo anualmente en 2.7 puntos porcentuales, seguido por Joaquín Balaguer con 8.4 puntos (-1.6 p.p.), y Antonio Guzmán con 7.9 puntos (-1.3 p.p.). Joaquín Balaguer obtuvo 10 puntos en promedio anual del déficit del sector público consolidado en % del PIB, con 2.0%, seguido por Leonel Fernández con 5.7 puntos (3.6%) y Danilo Medina con 4.4 puntos (4.0%).
Antonio Guzmán recibió 10 puntos en variación anual promedio de la deuda del sector público consolidado como % del PIB, con -1.6%, seguido por Joaquín Balaguer con 9.6 puntos (-1.1%) y Leonel Fernández con 9.5 puntos (-1.0%). Danilo Medina obtuvo 10 puntos en déficit de cuenta corriente de la balanza de pagos como % del PIB (1.7%), seguido por Joaquín Balaguer con 8.8 puntos (2.2%) y Salvador Jorge Blanco con 8.2 puntos (2.4%). Leonel Fernández recibió 10 puntos en depreciación anualizada de la tasa de cambio, la cual alcanzó 1.3%, en parte debido a la apreciación de 27% del peso en 2005. En segundo lugar, quedó Antonio Guzmán con 9.5 puntos (2.8%), seguido por Danilo Medina con 9.0 puntos (4.0%).
Hipólito Mejía obtuvo 10 puntos en aumento anual promedio en el número de empresas de zonas francas, con 22, seguido por Danilo Medina con 7.7 puntos (18) y Salvador Jorge Blanco con 7.2 puntos (17). Leonel Fernández recibió 10 puntos en inversión extranjera directa anual promedio como % del PIB, la cual registró 4.0%, seguido por Hipólito Mejía con 8.9 puntos (3.7%) y Danilo Medina con 8.0 puntos (3.4%). Danilo Medina obtuvo 10 puntos en crecimiento anual promedio de las reservas internacionales netas, con US$650 millones, seguido por Leonel Fernández con 5.1 puntos (US$247.3 millones) y Salvador Jorge Blanco con 4.0 puntos (US$160.2 millones).
Danilo Medina recibió 10 puntos en crecimiento anual promedio de los ingresos por turismo, con US$479 millones, seguido por Leonel Fernández con 4 puntos (US$217.9 millones) e Hipólito Mejía con 0.7 puntos (US$72.9 millones). Danilo Medina obtuvo 10 puntos en aumento anual promedio en el número de habitaciones hoteleras, con 2,023 habitaciones, seguido por Leonel Fernández con 9.7 puntos (1,969) e Hipólito Mejía con 9.1 puntos (1,868). Danilo Medina recibió 10 puntos en inversión anual promedio del Gobierno en educación como % del PIB (3.9%), seguido por Antonio Guzmán con 2.1 puntos (2.2%) y Leonel Fernández con 1.7 puntos (2.1%).
Danilo Medina obtuvo 10 puntos en inversión anual promedio del Gobierno en salud como % del PIB (1.7%), seguido por Leonel Fernández con 6.6 puntos (1.4%) e Hipólito Mejía con 5.7 puntos (1.3%). Danilo Medina recibió 10 puntos en crecimiento anual promedio de la capacidad instalada de energía medida, con 244 MW, seguido por Hipólito Mejía con 7.8 puntos (199 MW) y Joaquín Balaguer con 1.1 puntos (60 MW).
La última variable considerada fue el índice de reformas. Para construirlo se ponderaron las siguientes reformas: arancelarias y acuerdos de libre comercio, tributarias, despolitización y transparencia de los precios de los combustibles, cambiaria, monetaria y supervisión bancaria, transparencia presupuestaria, seguridad social (pensiones y seguro familiar de salud), competencia en telecomunicaciones, apertura a la inversión extranjera, privatización parcial y reforma del sector eléctrico, laboral e inversión en infraestructura física. Los ponderadores oscilaron entre 3% y 20%, recibiendo la cambiaria la mayor ponderación. Joaquín Balaguer recibió 10 puntos al obtener un índice de reformas de 33.3, seguido por Hipólito Mejía con 7.6 puntos (25.6) y Salvador Jorge Blanco con 6.5 puntos (22.1).
Como señalamos al principio, las 18 variables evaluadas fueron ponderadas y los resultados obtenidos sumados para generar el Índice de Desempeño Consolidado de los Presidentes Dominicanos. El resultado final fue el siguiente: Danilo Medina, con 8.7 puntos registra el mejor índice de desempeño entre todos los presidentes que ha tenido República Dominicana en los últimos 53 años. Empatados en segundo lugar aparecen Leonel Fernández y Joaquín Balaguer con 6.2 puntos, seguidos luego por Antonio Guzmán (3.2), Hipólito Mejía (2.7) y Salvador Jorge Blanco (2.7).
De los resultados obtenidos se podría arribar a las siguientes conclusiones. En primer lugar, los miembros y simpatizantes del Partido de la Liberación Dominicana deberían sentirse orgullosos de los logros alcanzados por las administraciones de los dos presidentes que ha producido ese partido. La evaluación coloca a los presidentes del PLD en la primera y segunda posición en el ranking de mejor desempeño. En 11 de los 18 indicadores analizados, Danilo Medina obtuvo la puntación máxima de 10. Leonel Fernández recibió 10 puntos en dos indicadores. En otras palabras, en 13 de las 18 variables evaluadas, los presidentes provenientes del PLD lograron el mejor desempeño.
En segundo lugar, los reformistas y perredeístas deben sentir también especial orgullo por el evidente compromiso de sus presidentes con la ejecución de reformas estructurales fundamentales para el crecimiento económico y el desarrollo integral de la nación. El hecho de que Joaquín Balaguer, Hipólito Mejía y Salvador Jorge Blanco encabezan el ranking del Índice de Reformas lo dice todo. Muchas de esas reformas han contribuido al buen desempeño de la economía en los años subsiguientes.
En tercer lugar, la estabilidad macroeconómica ha sido una variable fundamental detrás de los indicadores de crecimiento, inflación, aumento del salario real y disminución de la pobreza. Debemos reconocer que en los años en que el Banco Central ha sido presidido por Héctor Valdez Albizu, la autonomía e independencia de la institución se ha hecho respetar. El factor Valdez ha contribuido de manera significativa en los logros y resultados registrados por los gobiernos de Danilo, Leonel y Balaguer.
En cuarto lugar, el progreso económico y social que hemos registrado en los últimos 53 años es el resultado de una serie de decisiones en cadena que han tomado los representantes de nuestros partidos políticos en el Ejecutivo y en el Legislativo. Así como leyeron. Han sido los políticos, si, los “malditos políticos” a los que se refieren muchas veces la sociedad civil y las redes sociales, los principales responsables del progreso económico que hoy acumula República Dominicana. Debilitar nuestros partidos políticos, desprestigiar a la clase política con campañas basadas en el odio y el resentimiento, y denigrar la política, una de las vocaciones más nobles de servicio, solo sirve para allanar el camino a populismos estúpidos y a potenciales destructores de naciones. Si alguien lo duda, pregunte a nuestros hermanos venezolanos. Todos, absolutamente todos los presidentes que hemos tenido desde 1966, han estado comprometidos con la adopción de reformas, decisiones y medidas destinadas a mejorar las condiciones de vida de los dominicanos. Todos, sin excepción, han sido los arquitectos del progreso económico que ha registrado la República Dominicana en los últimos 50 años.
En quinto lugar, es cierto que en ocasiones se cometieron errores que nos hicieron retroceder o perder impulso. Recordemos que son humanos y no dioses a quienes llevamos a la Presidencia de la República. También es cierto que pudimos haber avanzado más. No olvidemos que no es lo mismo ejecutar reformas bajo regímenes autoritarios que hacerlo en democracias. En estas últimas, muchas veces hay que hacer concesiones que nadie se atreve a solicitar en las geografías autoritarias que han registrado un progreso económico y social asombroso.
Finalmente, aunque Bosch fue efímero en el poder, ha sido el político más fecundo que hemos conocido los dominicanos. Creó el PRD, partido que, con la energía incomparable de Peña Gómez, nos entregó tres presidentes que dejaron una marca indeleble en la historia económica de la nación. Creó el PLD, el partido que, con 20 años de gobierno, dos presidentes y un férreo compromiso con políticas económicas sanas, ha generado más progreso económico y social en la nación.