El ministro de Energía y Minas (MEM), Antonio Almonte, definió como urgente y básico mejorar el esquema de gerencia en las empresas distribuidoras de electricidad, así como incrementar la inversión en la distribución de energía en la República Dominicana.
Durante una entrevista en el programa Despierta con CDN-elCaribe, Almonte afirmó que llegó a la institución con una visión clara de lo que debía hacerse en el sector eléctrico en materia de generación, transmisión y distribución de electricidad, así como los cambios que debían realizarse en los aspectos institucionales para optimizar el servicio.
El funcionario sostuvo que hasta el momento se están llevando a cabo cambios significativos en los aspectos institucionales, un proceso que, según dijo, aún está en curso, sin entrar en detalles sobre cuáles serían esos progresos.
En cuanto a la generación de electricidad, destacó que se han logrado avances significativos tanto en la generación convencional como en la renovable.
Sin embargo, Almonte identificó dos problemas fundamentales en el área de distribución. El primero se relaciona con el esquema de gerencia de la empresa distribuidora, mientras que el segundo se refiere a la necesidad urgente de incrementar la inversión en la distribución eléctrica.
El titular del MEM expuso que se debe mejorar la inversión en redes, medidores, transformadores y subestaciones, y señaló que al asumir el cargo encontró una infraestructura técnica de distribución atrasada y en muy malas condiciones.
Los hechos hablan
“Creo que los resultados así lo indican, no es una campaña ni un discurso, porque si se hubieran hecho las inversiones que se anunciaron en el pasado, no estaríamos sufriendo los problemas actuales”, expresó. Al asumir el cargo, subrayó que encontró una infraestructura de distribución atrasada y en malas condiciones, lo que ha generado problemas actuales con transformadores de hasta 40 años, así como redes y subestaciones en mal estado.
Dijo que las inversiones que estaban previstas para el año 2021, incluso las licitaciones realizadas, se vieron afectadas por el brusco aumento del precio de los combustibles durante ese año. Resaltó que, apenas meses después de la llegada del nuevo Gobierno, se produjo a nivel internacional una crisis en los precios del carbón y el gas natural.
Afirmó que esos aumentos no se produjeron por razones políticas, sino debido a una cadena de eventos fortuitos, principalmente de tipo climático, así como otros eventos que ocurrieron en Estados Unidos y que obstaculizaron la oferta de gas natural a nivel internacional.
Sostuvo que otro de los países más afectados fue China, que experimentó una serie de eventos climáticos como inundaciones y frío extremo que colapsaron su sistema de producción de carbón, lo que obligó al gigante chino a comprar carbón en cualquier lugar y a cualquier precio.
El efecto del aumento
Asimismo, mencionó que en ese mismo año, 2021, el precio del gas natural se multiplicó por cuatro, a pesar de que no había una guerra entre Ucrania y Rusia ni ningún otro conflicto armado que afectara la producción de electricidad.
Antonio Almonte afirmó que estos eventos ocurridos en 2021 fueron los responsables del incremento total en el precio al que las generadoras vendieron la electricidad a las distribuidoras. Por lo tanto, indicó que las distribuidoras se vieron obligadas a enfrentar aumentos significativos en sus facturas de compra sin poder trasladar esa misma proporción de incremento de precios a los consumidores. Con el fin de encontrar una solución a esta situación, resaltó que el Gobierno dominicano tuvo que aumentar el subsidio que se otorga a las distribuidoras para compensar las pérdidas que estaban experimentando. “Por lo tanto, el Gobierno se vio en la necesidad de destinar más fondos a las empresas distribuidoras para poder pagar a las generadoras y mantener la cadena de suministro”.
Más de 823 millones de dólares adicionales
Almonte explicó que el presupuesto que habían establecido las distribuidoras para la compra de energía a las generadoras en 2022 se excedió en 823 millones de dólares al final del año, es decir, adicional al monto que el Gobierno siempre transfería. Sin embargo, destacó que el presidente Luis Abinader no solo tuvo que hacer frente a estos subsidios, sino que también se vio en la necesidad de aumentar otros debido al impacto inflacionario de la guerra de Ucrania. “Para evitar una situación de inflación insostenible en el país, el Gobierno no pudo destinar todo el dinero del subsidio al sector eléctrico y, por lo tanto, no pudo realizar compras de transformadores, medidores y redes”.