Las estadísticas del Banco Central de las llegadas de turistas internacionales cortadas a noviembre pasado indican que en el período enero-noviembre se ha registrado una caída del 3.8%, provocada por una disminución de más de 211,867 turistas. Por vía aérea en los primeros 11 meses del año recibimos 4,884,444 turistas, y en año pasado fueron 5,096,311.
En julio pasado, tomando en cuenta la crítica situación de ese momento hice un estimado de que por efecto de la campaña negativa tendríamos el decrecimiento sería superior de un 8%, provocado por una reducción de un 30% en el flujo turístico desde Estados Unidos y Canadá y un 15% desde Europa. En ese momento no podíamos considerar la crisis de Chile, las complicaciones económicas y políticas de Brasil y el recrudecimiento de los padecimientos de la economía de Argentina.
Además, apenas comenzaba la reacción del Gobierno a la crítica situación. La buena noticia es que la evolución de los acontecimientos que se refleja en el comportamiento de las llegadas parece indicarnos que es posible que cerremos el 2019 con una disminución que estará entre el 3 y el 4 por ciento en relación con los resultados del 2018.
Para alcanzar los 5.6 millones de visitante internacionales que tuvimos el año pasado, necesitaríamos 734,117 turistas. En diciembre del año pasado recibimos más de 522 mil. Si logramos esa misma cantidad el año concluiría con 5.4 millones, 211 mil menos que en el 2018 y el decrecimiento sería de un 3.7%, aproximadamente la mitad de lo que inicialmente estimamos considerando el comportamiento de junio y julio pasados.
Hasta ahora la disminución de las llegadas a partir de la campaña negativa que estalló a finales de mayo pasado ha sido de 12,566 en junio, 90,573 en julio, 54,973 en agosto, 50,062 en septiembre, 56,495 en octubre y 34,156 en noviembre. En total perdimos 211, 867 turistas en el período.
La ocupación en los hoteles, en comparación con el mismo mes del año pasado, disminuyó 17.4 puntos en junio, 22.5 en julio, 17.5 en, 7.3 en septiembre y 1.9 en octubre. La tasa de ocupación hotelera acumulada en el período enero-noviembre 2019 arrojó un promedio de 71.9%, un 5.6% menos que en igual periodo del año 2018 en que registró una tasa de 77.5%.
Considerando estas cifras sería poco realista pensar que podemos igualar el año pasado. Las informaciones que fluyen proyectan una recuperación, pero no permiten esperar un crecimiento extraordinario en diciembre para evitar un cierre negativo. Si así fuera ya lo sabríamos porque en este momento hemos consumido los primeros dos tercios del mes. Nos anotaríamos un importante logro si cuando se llegue el reporte de diciembre, nos informan que recibimos los más de 522 mil que se registraron en los aeropuertos el último mes del año pasado.