El Código Laboral fue debatido durante dos años logrando un consenso en el 98 % de los temas, pero se dejó fuera la cesantía por falta de acuerdo entre el Gobierno, empresarios y sindicalistas. Los representantes empresariales acudirán al Congreso a presentar su posición, hay que escucharlos sin apasionamientos ni populismo. La cesantía es sagrada porque es un ahorro para los empleados, pero es insostenible para los empresarios. Poner topes es una alternativa, como tope de años, con un rango de cinco y ocho. O bien, que se limite en el número de salarios mínimos para calcular. Hay un pasivo laboral importante, y esas opciones pueden permitir que muchos empresarios aumenten los salarios.