Entre las reformas propuestas para ser discutidas en el Consejo Económico y Social, está la del Código de Trabajo. En ese contexto, el empresariado nacional ha revivido su agenda para la eliminación de derechos laborales, como son el preaviso y la cesantía. La cesantía representa alrededor del 90 % del dinero entregado a los trabajadores cuando son desvinculados.
También en la agenda del empresariado criollo está la extensión de prueba de los trabajadores de tres meses a un año. Eso quiere decir que los trabajadores podrán ser cancelados sin adquirir derecho al preaviso y la cesantía hasta en un año.
Si se permiten esas modificaciones al Código Trabajo, estaríamos en un escenario de reducción de beneficios adquiridos a los trabajadores dominicanos, lo cual sería involutivo y contrario a la lógica de los avances con el tiempo de los sectores sociales.
La cesantía laboral está entre los derechos adquiridos por los ciudadanos gracias a la lucha de grandes defensores nacionales e internacionales de la clase trabajadora, como el dominicano Mauricio Báez, quien fue desaparecido por su defensa a los trabajadores, el 8 de diciembre de 1950, en La Habana, Cuba.
El empresariado nacional alega que la cesantía laboral representa un alto costo para sus empresas, y limita la competitividad de República Dominicana, los cuales son argumentos muy flojos y carentes de empatía y humanidad hacia sus trabajadores.
Los trabajadores dominicanos no podemos permitir que nos quiten esos beneficios adquiridos, que sin ellos nos iríamos prácticamente con una mano delante y otra detrás cuando seamos desvinculados de nuestros puestos de trabajo.
Pero esa batalla estaría muy débil sin contar con el respaldo de los pocos verdaderos sindicalistas que nos quedan en República Dominicana, otros sectores sociales y el rechazo del gobierno del presidente Luis Abinader, quien estamos seguro no apoyará ese atentado contra la clase trabajadora dominicana.
El autor tiene 26 años de experiencia en medios de comunicación y relaciones públicas.