El anuncio al país del diálogo entre el Ministerio de Salud Pública (MSP) y el Colegio Médico Dominicano (CMD), de asumirlo con la profundidad y alcance que amerita la situación de la salud en la República Dominicana, puede significar un gran momento hacia las inaplazables transformaciones de esa neurálgica vertiente del desarrollo nacional.
A veces no parece existir real conciencia de cómo estamos en Salud en la República Dominicana y además de las grandes oportunidades que tenemos actualmente para avanzar efectivamente.
Al referirnos a donde estamos, igual que en educación, ayuda el vernos en las comparaciones internacionales. Nosotros mismos, al mirarnos al espejo, no lucimos tan mal; y como siempre algo se hace o algo se promete que se hará, nos da la sensación de que nuestra propia imagen al espejo luce bien.
De ahí que un primer esfuerzo de diagnóstico relativamente objetivo de ese atuendo que no luce tan mal, es vernos frente a las demás naciones del mundo y especialmente de la región de la que formamos parte, América Latina y el Caribe.
¿Qué dicen los números? ¿Quién refiere esos números?
Veamos primero respecto a qué dicen los números sólo para algunos indicadores.
En lo que corresponde a la tasa de mortalidad infantil por 1000 nacidos vivos, el promedio de América Latina y el Caribe es de 15.6 y para la República Dominicana es de 26.9, mientras que para Chile es 7.4, Cuba 4.9 y Martinica 9.3. En la mortalidad materna el promedio es 69.4 para la RD es de 106.3, mientras que para Costa Rica es 23 y Puerto Rico 11. En cuanto a la incidencia de la Tuberculosis el promedio es 34.4, en la RD es de 39.9, Costa Rica 10.5, Cuba 7.3 y Puerto Rico 2.1. Citemos un indicador diferente pero que dice mucho, en caso de enfermeras por cada 1000 habitantes para la RD es de 2.1, Costa Rica 19 y Cuba 95.
¿Quién o quienes lo dicen? La Organización Mundial de Salud-OMS- y la Organización Panamericana de Salud- OPS- en su informe regional de hace apenas 4 años. Es sabido que esos indicadores no se modifican sustancialmente en tan poco tiempo.
De ahí que una de las acciones de mayor importancia de cuánto pueden hacer el MSP y la CMD que anuncian el diálogo, es un Plan Maestro de consenso; pero en esta oportunidad con el claro compromiso de su implementación efectiva, que marque una real diferencia con respecto a lo que sucedió con el Plan Decenal de Salud PLANDES 2006-2016 que no pasó de la “cultura del análisis”.