El Partido de la Liberación Dominicana (PLD), vive días grises y hasta sus miembros más nuevos lo saben. Esa renovación que inició una vez salió del poder, en 2020, ha traído grandes consecuencias.
Muchos altos dirigentes han hecho “bembita”, acostumbrados a una línea de acción desde el poder, sin embargo, otros más realistas se han concentrado en trabajar y trabajar, como lo ha demostrado el secretario general del partido morado, el exsenador Charlie Mariotti, que ha estrenado una secretaría itinerante con visitas casi todos los fines de semana a algún pueblo del país.
Hemos visto sangre nueva sacar la cabeza, en un intento de su alta dirigencia, por mostrar que no todo ha sido contaminado en el PLD. Juan Ariel Jiménez, es uno de ellos, quien ha fungido con gallardía y entrega su posición como vicepresidente de la agrupación política, que ha estado bajo el escrutinio público, luego de que varios exfuncionarios del Gobierno que encabezó Danilo Medina, hayan sido requeridos por la justicia para enfrentar diversos cargos, entre ellos, corrupción y estafa al Estado.
Algunos dirigentes peledeístas no han soportado el dedo acusador y han saltado del barco mucho antes de llegar a puerto seguro, convencidos de que en otro partido encontrarán el espacio que ya no encuentran en el PLD. No obstante, hay una militancia fiel que no se doblega y que está dispuesta a sobrepasar vendavales para volver al poder, aunque esa conquista no sea en un tiempo cercano.
Para el 2024, hay fichas a la que apuestan para ir sacando la cabeza, Abel Martínez es una de ellas, cuya candidatura en estos días cobró un nuevo impulso con la llegada al equipo del veterano Roberto Rodríguez Marchena, conocedor de estrategias políticas y comunicación. Ya se siente un aire diferente.
Por otro lado está Margarita Cedeño, una de las cartas que pudieran poner en el juego, dado su arraigo y carisma, como senadora del Distrito Nacional, candidatura que aún no está definida ni en el PLD y mucho menos en el PRM, pero tampoco en la Fuerza del Pueblo, aunque extraoficial se habla de que Omar Fernández será quien asuma esta curul. De aceptar Margarita la candidatura a la senaduría por el DN, sería una propuesta difícil de enfrentar por el alto nivel de simpatía que ha mostrado la doctora en su trayectoria política y experiencia probada. La contienda del 2024 promete, ¿imaginen a Omar Fernández y Margarita Cedeño enfrentados por una curul?, ambos con perfiles muy potables.