El miércoles de la semana pasada fui parte de uno de los eventos más emotivos y especiales a los que he asistido últimamente y fue la celebración de los primeros 40 años de la AIEHaina y el Sur.
Dijo Gardel que 20 años no eran nada, pues 40 años sí que son importantes, no sólo para la Asociación, sino para Haina y su historia cercana. Decía su pasada presidenta, la dinámica Bredyg Disla que, a lo largo de cuatro décadas ha quedado evidenciado que la Asociación de Industrias y Empresas de Haina y el Sur ha jugado un rol institucional centrado en promover, en primera instancia, el desarrollo sostenible de la comunidad en la que se encuentran sus raíces. No pudiera estar más de acuerdo, sobre todo que esos 40 años los he vivido junto a un grupo de los que en nuestros tiempos nos llamaban los “blúmeres”, de hecho,
éramos un puñado de jóvenes que aprovechamos la creación de la zona industrial de Haina, un espacio físico para ver desarrollar nuestros sueños.
Fuimos los emprendedores de esos tiempos y vimos que solos, no íbamos a avanzar lo suficiente para crecer y enfrentarnos a tantos desafíos, muchos de los cuales, aún persisten 40 años más tarde.
Recuerdo como ahora que, en ese entonces, sin local ni personal, nos reuníamos en Metaldeco, empresa que dirigía un gran amigo, Henry Sahdalá, que tanto gusto me dio verlo ese día de la celebración. Poco a poco fuimos creciendo, en principio dando palos a ciegas, luego nos fuimos organizando y creando lo que hoy somos.
Decía con mucha propiedad el Ministro de Industria y Comercio y Pymes, Víctor -Ito- Bisonó, quien tuvo a su cargo el discurso central del evento, que “Haina es parte esencial del motor industrial dominicano; en sus tierras se produce una gran variedad de bienes industriales y desde sus costas se exportan al mundo la mayor cantidad de productos fabricados en la República Dominicana”.
El acto estuvo cargado de muchas buenas noticias, la más importante de la tarde, que el Consejo Directivo del Centro de Competitividad e Innovación Industrial (PROINDUSTRIA), presidido por el ministro Bisonó y bajo la dirección del sr. Ulises Rodríguez, decidió autorizar la conformación del Distrito Industrial Haina, el primer Distrito Industrial, oficialmente declarado en virtud de la Ley 392-07 y sus modificaciones.
Los miembros de la nueva junta directiva recibieron con mucho orgullo el certificado que acredita a Haina como un conjunto de dos o más parques industriales que comparten una misma demarcación geográfica, y que han decidido integrar una cadena productiva y compartir servicios nacionales e internacionales.
Esto supone un cambio muy importante en el quehacer productivo de la zona industrial de Haina, en conjunto con los parques de zonas francas y empresas instaladas en el municipio de Nigua, ya que podrán ser favorecidos de incentivos especializados, creados con el fin de promover el desarrollo de ambos territorios. Estaremos atentos a la implementación exitosa de todos los beneficios y de la visibilidad que servirá para atraer más inversiones a la zona, más empleo y mayor riqueza para la comunidad.
Esta certificación fue avalada por los resultados de un estudio económico que hizo la AIEHaina y Región Sur, donde quedó demostrado que Haina es líder en productividad nacional. Con un valor agregado al cierre del 2018 de $24,659.6 millones de pesos, un aumento de $6,076.9 millones de pesos con respecto al 2010, que fue el año base usado por los economistas contratados. Estos y otros indicadores nos hacen merecedores de ser Distrito Industrial.
La celebración de los 40 años fue aprovechada para juramentar a la nueva junta directiva, formada por grupo de jóvenes, algunos de los cuales, son el relevo generacional; el presidente para el nuevo período, Napoleón, dijo en sus palabras de aceptación que la AIEHAINA es una marca, una organización más fuerte y que tienen todos los bríos y ganas de trabajar para continuar robusteciendo la entidad.
Finalmente, el acto no pudo tener mejor cierre que la sorpresa recibida a los que fuimos pasados presidentes de la AIEHaina: Nos entregaron una placa de reconocimiento por la labor que desempeñamos cada uno en nuestro paso por la Asociación.
Desgraciadamente, no estábamos todos, ya han partido hacia mejor destino, tres pasados presidentes, los cuales han dejado su huella, no sólo en la asociación sino también en el corazón de cada uno de nosotros. Nuestros queridos Andrés Julio Grullón, Federico Gómez y Jorge Abbott. Fue muy especial para mi ver a los familiares de ellos, los cuales recibieron en su honor, esta hermosa distinción.
Hay que reconocer y destacar los trabajos tesoneros Richard Arostegui, Rafael Álvarez, María Alejandra Grullón, Eduardo De Castro y Flavio Rodríguez, todos pasados presidentes y muy buenos amigos.
Es un orgullo para mí, ser parte de una organización que durante tantos años ha representado al enclave industrial más importante del país, luego de las zonas francas, siempre defendiendo sus legítimos intereses y apoyando a la comunidad que conforma el entorno de las industrias que además ha estado comprometida en producir bienestar a la sociedad, a través de las oportunidades de empleo, la generación de divisas por vía de las exportaciones, las contribuciones al fisco para financiar las políticas públicas, y los aportes a la comunidad que nos rodea a través del Patronato de la industria, con una lista larga de obras sociales, como lo son las 13 escuelas construidas y el politécnico de Haina, el IPHA, aspectos sobre los cuales, ya les dedicaré otras entregas.
Sería injusto si no termino agradeciendo a nuestra Vicepresidenta Ejecutiva, Dircia Paulino, por ser parte del éxito de nuestra querida zona industrial y su siempre activa participación en el bien de la comunidad. Siempre recordaremos que, en la pandemia, mientras muchos estábamos en casa, ella y las abejas de la AIEHAINA, preparaban kits de comida para los que habían perdido sus empleos.
Haina lo tiene todo, apoyémosla.